Artículo publicado en abril de 2007

Josu Montalbán* - Cubainformación.- Recientemente el Embajador de EEUU en España, Eduardo Aguirre ha publicado un artículo en un diario de gran tirada (“Valores que compartimos sobre el futuro de Cuba”) que hace una valoración interesada de las posiciones española y europea sobre dicho futuro y dicho país y pretende, mediante un acercamiento formal a dichas posiciones, eludir el análisis de fondo en torno al miserable comportamiento de todos los gobiernos USA, unos más y otros menos, desde hace casi cincuenta años, para con Cuba y con los cubanos.

A lo largo de su artículo el Embajador no cesa de llamar a la transición democrática en la isla: “alentar a cuantos anhelan ver una Cuba democrática”, “necesidad de enfatizar valores democráticos”, “es el momento propicio para comenzar a ver una transición democrática en Cuba”, “la comunidad internacional quiere que Cuba forme parte de la comunidad de democracias del mundo”, “existe la esperanza de que Cuba comience su transición”, etc... Del mismo modo establece que “los gobiernos democráticos, y especialmente los de la UE, se solidaricen activamente, más allá de la retórica sutil (no con el gobierno dictatorial de Cuba) con el pueblo cubano”. Según él “las naciones democráticas deben encontrar la manera de solidarizarse con el pueblo de Cuba”. Son curiosos como poco, tanto el oportunismo de adherirse a unas declaraciones realizadas por Zapatero y otros líderes europeos respecto de Cuba, como la forma de interpretar la Historia para reclamar de ella un esfuerzo solidario con el pueblo cubano. Hipocresía y cinismo van juntos en este caso, porque la gran insolidaridad con el pueblo cubano procede precisamente de los sucesivos gobiernos de EEUU.

Los cubanos vienen sufriendo el bloqueo de EEUU durante los últimos cincuenta años. Desde que Fidel Castro, al frente de sus milicias revolucionarias, entró triunfador en La Habana, los sucesivos gobiernos norteamericanos han continuado fieles a una sola estrategia: estrangular todas las resistencias y esperanzas del pueblo cubano para que sus ciudadanos sientan la pobreza y las carencias. Primero fue el bloqueo económico y comercial que echó en brazos de la Unión Soviética al gobierno cubano. Y luego, cuando cayó el bloque soviético, la vuelta de tuerca brutal con la implantación de la Ley Helms-Burton que entronizaba el bloqueo existente, convirtiéndole en Ley, e intentaba que el resto de países relacionados comercial y económicamente con EEUU se vieran obligados a practicar una forma peculiar de bloqueo hacia Cuba si querían seguir manteniendo comercio y relaciones con Estados Unidos. ¿No es esta una agresión directamente dirigida a los cubanos, y no a Fidel Castro o su Gobierno?

Resulta sobrecogedor que sea un Embajador de EEUU quien enarbole la bandera de la autodeterminación del pueblo Cubano. (“El futuro de Cuba debe ser determinado por su propio pueblo”). Porque recién se desembarazó Cuba del dominio español se encontró en las garras de EEUU. En aquel tiempo el alma de la liberación de Cuba José Martí ya advertía que lo que se jugaba en Cuba era, más allá de la propia suerte de los cubanos, el equilibrio del Mundo. Por eso en el último instante de la guerra, ya debilitada España, intervino EEUU para reconocer que Cuba debía ser un país libre e independiente. Así fue como se produjo la derrota definitiva del ejército español y la ocupación de la isla por el ejército norteamericano. El general cubano Máximo Gomez escribió en su Diario: “Los americanos han amargado con su tutela impuesta por la fuerza la alegría de los cubanos vencedores”. Hasta el triunfo de la Revolución, en 1959, fueron seis décadas de dominación de EEUU por medio de sátrapas como el derrotado por la Revolución, el inefable Batista.

Pues bien, el embajador Eduardo Aguirre no parece conocer estos pasajes de la Historia en los que los cubanos vivían bajo el yugo yanqui. Hoy, casi cincuenta años después, EEUU no puede resistir el odio ni las ansias de venganza hacia los artífices de su derrota, que no fueron los comandantes que tomaron las riendas del gobierno posterior, sino los millones de cubanos que les aclamaban en las avenidas de La Habana. El pueblo cubano se desembarazó de la ignominia entonces, y ha seguido resistiendo con valor porque prefiere la dignidad al halagüeño futuro de progreso que el capitalismo yanqui de Miami usa como añagaza. El Embajador Aguirre establece en su artículo una similitud entre Cuba y algunos países subdesarrollados: “Hemos observado con admiración la compasión de los españoles y los europeos hacia los pueblos oprimidos y desaventajados económicamente, en África, Oriente Próximo y otras regiones del Mundo”. No parece lógica la comparación porque Cuba tiene el mayor índice de escolarización y formación universitaria, y todo un ejército de médicos y personal sanitario, dispuestos en todo momento a acudir a cualquier lugar del Mundo donde se produzca una tragedia. No cabe, por tanto, argüir que Cuba es un país subdesarrollado, porque bastaría con que el bloqueo se levantase y que dejara de aplicarse la Ley Helms-Burton para que Cuba despegue en las pistas del desarrollo como un avión a reacción.

Que en Cuba deben producirse cambios importantes es algo de lo que nadie duda. El mero hecho de que Fidel Castro pase ya de ochenta años y haya sufrido la última enfermedad, ha hecho aflorar a los especuladores. Miami se ha convertido en una reserva de buitres al acecho. En el ánimo del embajador Aguirre está que todo se resuelva con el final de Fidel: “si EEUU y la Unión Europea coincidieran públicamente en rechazar la transferencia de poderes dentro de la familia Castro, enviaríamos un impactante mensaje”. Lo que no tiene en cuenta el Embajador es que Raúl Castro es uno de los que entraron en La Habana y, por tanto, tan inspirador y protagonista de la Revolución como su hermano Fidel. Igualmente el Embajador se permite negar credibilidad al Gobierno cubano (“...no merece la credibilidad internacional para negociar de buena fe”) para establecer cualquier tipo de negociación. Y yo le preguntaría: ¿incluso para pergeñar un proceso o plan democratizador? ¿Con quién cree que debiera ser negociado un proceso de este tipo si llegara a producirse? ¿Acaso con los cubanos de Miami?

El Embajador Aguirre yerra en sus apreciaciones porque EEUU ha negociado recientemente  acuerdos de todo tipo con China, donde no hay democracia ni visos de transición, sólo porque se ha abierto económicamente y ha aceptado el neoliberalismo más brutal. En China no se respetan los derechos humanos básicos, la pena de muerte se utiliza incluso con mayor frecuencia que en EEUU, y sólo existe un partido político autorizado, exactamente el partido de su Presidente. Para más INRI el Embajador Aguirre debe conocer, aunque no alude a ello, las múltiples ocasiones en que su país ha desoído a las instituciones europeas y a la misma ONU, cuando le ha reclamado que ponga fin al bloqueo económico a Cuba porque somete al pueblo cubano a un perjuicio añadido.

En suma, la democratización de Cuba encuentra su mayor escollo en el comportamiento de EEUU. Cuba, y la gran mayoría de los cubanos, han optado por un sistema social basado en el socialismo, ni siquiera en la socialdemocracia, que le ha dado como resultado una sociedad igual e igualitaria, una Educación ambiciosa que llega a todos los cubanos, una Sanidad que bien puede servir como modelo en muchas partes del Mundo y un espíritu solidario muy enraizado socialmente. Que no sea un país rico no es problema exclusivo ni de Fidel Castro, ni de su Gobierno, ni de Cuba ni de los cubanos, dado el comportamiento mezquino y miserable de EEUU. En todo caso, al margen de los vicios y perversidades que se estén dando en la sociedad cubana, hay que subrayar el honor y la dignidad que han caracterizado a los cubanos y cubanas desde el triunfo de la Revolución. Este honor y dignidad demostrados alcanzan su máximo valor porque han sido enarbolados por las manos humildes del pueblo, muy a pesar de todos los gobiernos de EEUU desde 1959.
 

* Portavoz del PSE-PSOE en las Juntas Generales de Bizkaia (País Vasco)

Contra Cuba
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