Por Hedelberto López Blanch*/Foto Virgilio Ponce.- De catastrófico para la economía mundial se puede catalogar el año 2020 tras desatarse la pandemia de coronavirus que ha provocado en el orbe una de las mayores crisis de los últimos 80 años.  Muy pocos países salieron incólumes ante tamaña enfermedad que ha demostrado la incapacidad del sistema capitalista neoliberal para enfrentar y proteger a la mayoría de sus poblaciones de los graves efectos del flagelo. 


Un informe publicado en noviembre por el Instituto Internacional de Finanzas, señala que la deuda de hogares, empresas, bancos y gobiernos de todo el planeta sumaba al cierre del tercer trimestre de 2020, 272 millones de millones de dólares y alcanzará a finales del año un máximo histórico de 277 millones de millones de dólares, que representan 365 % del Producto Interno Bruto (PIB) mundial.

Desde  diciembre de 2019 (cuando se descubrieron los primeros brotes en China) hasta diciembre de este 2020, se habían contagiado en el orbe 76 309 456 personas y fallecidos 1 743 235, mientras a la cabeza de estos desastrosos datos aparece Estados Unidos con alrededor de 18 millones de infectados, más de 330 000 muertos y un decrecimiento económico estimado entre 4 y 5 % del PIB.

En cuanto a los países de la Unión Europea, se estima que la caída del PIB para fines de año se ubicará entre 13 y 15 % y entre los más afectados estarán España, Italia, Francia, Bulgaria, Rumania y Gran Bretaña.

América Latina 

Estudios de la Comisión Económica para América latina (CEPAL) estiman que la región ha sufrido una profundísima crisis y que le costará más de diez años volver a los niveles que tenía en 2019.

La CEPAL y el Fondo Monetario Internacional indicaron que la baja se situará entre 7,5 y 9 % y al perder sus fuentes de empleo quedarán más de 80 millones de latinoamericanos y caribeños en condiciones de hambruna.  

Con 12,6 millones de contagios y más de 440 000 fallecidos por la COVID-19, una tasa de desempleo abierto urbano de 11,4% y más del 50 % en el sector informal, la recuperación económica de esa región será prolongada.

La pandemia aumentó la desigualdad

A nivel planetario, el coronavirus incrementó la desigualdad económica-social que ya se había tornado espeluznante desde que hace unas décadas apareció y se impulsó la llamada globalización capitalista. Mientras el hambre ha revoloteado por encima de miles de millones de personas, solo unos pocos han aumentando descomunalmente sus fortunas.

Por ejemplo, un grupo multimillonario de Wall Street, conocidos como la “docena oligárquica” ya posee 1 015 billones de dólares. Una investigación del Instituto de Estudios de Política (IPS) de Estados Unidos, afirma que desde marzo de este año, los 12 multimillonarios más prominentes de Wall Street incrementaron su fortuna combinada en un 40 %, o sea, 283 000 millones. La Organización No Gubernamental Oxfam denunció que las 62 personas más ricas del mundo poseían superiores capitales, que la mitad más pobres.

Extorsiones de Estados Unidos

Pese a la catastrófica situación del planeta por las consecuencias de la Covid-19, la política internacional de administración de Donald Trump incrementó los bloqueos económicos y extorsiones financieras contra disímiles países. Esas medidas de fuerza, llamadas eufemísticamente “sanciones”, ha atacado a más de una veintena de naciones entre las que aparecen China, Rusia, Venezuela, Cuba, Nicaragua, Irán, Irak, Yugoslavia, Birmania, Zimbabwe, Bielorrusia, República Democrática del Congo, Siria, Somalia, Libia, Costa de Marfil, Líbano, Ucrania, Yemen, Sudán del Sur, y también sus propios aliados occidentales.

Bloqueos contra Cuba, Venezuela y Nicaragua

Con la manifiesta intención de destruir los procesos democrático-sociales establecidos en Cuba, Venezuela y Nicaragua, Washington recrudeció el bloqueo económico financiero hacia esos países. Contra Venezuela ha utilizado todo tipo de ensañamiento pero no le ha dado resultado. En el caso de Cuba, un documento presentado por el Ministerio de Relaciones Exteriores puntualiza que esa inhumana medida provocó de abril de 2019 a marzo de 2020 “pérdidas por 5 570 millones de dólares”. A precios corrientes, los daños acumulados durante casi seis décadas de aplicación de esta política ascienden a 144 413.4 millones de dólares.

China levanta vuelo

El gigante asiático ha logrado detener los graves efectos económicos-sociales que provocó la pandemia, profundiza la expansión de su comercio con todos los continentes y se estima que será uno de los pocos países del orbe que mostrará crecimiento positivo de entre 3,5 y 4 %.

La ASEAN y la zona de libre comercio

De la mano de la ASEAN, integrada por 10 países, se concluyó en noviembre, el mayor tratado de libre comercio del mundo, nacido con el nombre de Asociación Económica Integral Regional (RCEP) y que engloba a 15 países de la región Asia Pacífico. En términos concretos, los integrantes de la RCEP (en el que Estados Unidos quedó fuera) poseen alrededor de un tercio de la economía del planeta, con un PIB combinado de unos 26,2 billones de dólares y una población cercana a 2 200 millones de consumidores en la región con mayor crecimiento del mundo.

Rusia por salir del estancamiento

Pese a que la pandemia dio un duro golpe a la economía rusa, la nación se recupera ya que como dijo el presidente Vladimir Putin, el país tiene recursos y capacidad para restaurarla. La estabilidad del rublo en los últimos meses y las medidas de apoyo del Gobierno a los ciudadanos durante el año evitaron un salto dramático del desempleo. La nación ensaya varias vacunas contra el coronavirus y ya se inocularon numerosas personas con la Sputnik V.

Arrecia calamidad de los inmigrantes

A lo largo del año continuó incrementándose el número de inmigrantes que huían de guerras, acciones de bandas armadas, desempleo, pobreza, pandemia y de las políticas neoliberales. Miles perdieron la vida al cruzar las temidas aguas del Mediterráneo en el afán de alcanzar las costas europeas desde África en frágiles embarcaciones de traficantes, o los que realizaron extensas caminatas para intentar llegar desde Centroamérica a las fronteras de Estados Unidos en busca de un mejor estatus económico. El desastre humano que eso significa ha sido prácticamente ignorado por las antiguas metrópolis europeas y estadounidense culpables del saqueo de esos países durante siglos.

África con grandes dificultades

En África donde se encuentran 38 de los 45 países más pobres del mundo, la situación se agrava porque la pandemia ha reducido los empleos y las inversiones, además de sufrir con fuerza el cambio climático con sequías y el brote de plagas que destruyen sus cultivos; robo de sus riquezas por compañías transnacionales; tráfico de personas, terrorismo religioso y otras secuelas dejadas e impulsadas por las ex potencias colonialistas que hacen todo lo posible por mantener el control en la región.

El Papa Francisco

Nadie mejor que el Papa Francisco supo definir lo sucedido en nuestro planeta cuando en la Audiencia General del 26 de agosto enfatizó que “la desigualdad generada por la pandemia es el fruto de un crecimiento económico injusto, que prescinde de los valores humanos fundamentales”. Esperemos que el 2021 traiga al mundo menos desgracias.

 

*Hedelberto López Blanch, periodista, escritor e investigador cubano, especialista en política internacional.

Martianos-Hermes-Cubainformación

Estos textos pueden ser reproducidos libremente siempre que sea con fines no comerciales y cite la fuente.

La Columna
Por Hedelberto López Blanch*/Foto Virgilio Ponce.- La noticia ha sido más que halagüeña para el país más extenso de América Latina, pues Brasil entró en 2024 como la novena economía m&aacut...
Por Hedelberto López Blanch*/Foto Virgilio Ponce.- La Unión Europea se enreda cada día más con problemas económicos y sociales en detrimento de sus poblaciones, vinculados directamente a la decisión de sus di...
Por Hedelberto López Blanch*/Foto Virgilio Ponce.- Los militares israelíes están dejando pequeñas las historias sobre el holocausto que cometió Adolfo Hitler contra los judíos en las décadas de 1930 y ...
Lo último
La Columna
La Revista