Por Arthur González*/Martianos-Hermes-Cubainformación.- Conocida por sus posiciones de extrema derecha y fiel seguidora de la línea política de Donald Trump, la checa Dita Charanzová, vicepresidenta del Parlamento Europeo, no cesa de atacar a Cuba y acusarla de “violar” los derechos humanos, pero de las verdaderas y criminales violaciones de gobiernos afines a Washington, no dice una sola palabra.

Más parecida a una subordinada del Departamento de Estado yanqui que al propio Parlamento Europeo, Charanzová intenta conformar una matriz de opinión contra la Revolución cubana, en busca de que la entidad que representa rompa los acuerdos entre la Isla y la Unión Europea, con el evidente interés de retomar la fracasada Posición Común, propuesta por José María Aznar, otro peón de Estados Unidos.

¿A qué libertades básicas y derechos humanos se refiere para atacar a Cuba?

Como si le hubiese copiado el discurso a Donald Trump del 16 de junio 2017 en Miami, la susodicha declaró recientemente:

“Es hora de darnos cuenta de que nuestra estrategia actual no está funcionando en beneficio del pueblo cubano”.

Siguiendo la misma táctica yanqui de querer ahogar al pueblo cubano, prende confundir a los parlamentarios y a la opinión pública europea, de que en Cuba se “violan” los derechos humanos, todo dentro del contexto lanzado por los yanquis de defender a la contrarrevolución interna en la Isla, creada y financiada por Estados Unidos, que no tiene reconocimiento popular alguno, por su ausencia de moral, ética y su carácter mercenario.

Sus declaraciones se enmarcan en el recién encuentro bilateral entre la Unión Europea y Cuba, situación que amarga al Departamento de Estados al insistir en aislar a la Revolución y recrudecer su guerra económica, comercial y financiera, en medio de la terrible pandemia que afecta al mundo.

Para disgusto de la mafia terrorista anticubana de Miami y los políticos estadounidenses que se oponen a un mejoramiento de relaciones con La Habana por parte de la nueva administración de Joe Biden, el comunicado del encuentro bilateral presidido por el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell y el canciller cubano Bruno Rodríguez Parilla, afirma:

“Resultó un fructífero debate con el ministro de Asuntos Exteriores cubano, Bruno Rodríguez, sobre las relaciones generales UE-Cuba y el impacto de las sanciones estadounidenses en la economía cubana y en los intereses comerciales y de inversión de la UE”.

Esta posición no es aceptada por Washington, quien de inmediato movió a sus peones para criticarla y combatirla.

El mundo pudo seguir por la TV de Cuba Internacional, la verdad sobre el fabricado “Movimiento San Isidro”, el cual ni es movimiento, ni tiene seguidores, está integrado por gente de baja catadura moral, que no serían jamás aceptados en ningún país de la Europa culta y educada.

La convocatoria realizada por las redes sociales a concentrarse ante el Ministerio de Cultura, a finales del año 2020, fue promovida por otra de las piezas yanquis, Tania Brugueras, provocadora de larga data en acciones de corte subversivo, quien logró a través de mentiras, arrastrar a varios jóvenes estudiantes de arte e incluso artistas consagrados, que, al palpar la verdad en los videos mostrados en la TV, se desmarcaron de la patraña sediciosa dirigida por la embajada de Estados Unidos en La Habana, prueba de la ausencia de autenticidad de ese inventado “Movimiento”.

Elementos probatorios demuestran que detrás de la checa Dita Charanzová, está la mano de los yanquis, al ser parte de sus campañas tendenciosas respaldadas mediáticamente por Radio Televisión Martí, engendro para la guerra psicológica contra Cuba, creado y financiado por el gobierno de Estados Unidos, a pesar de que jamás se ha escuchado ni visto en la radio y televisión de la Isla.

La ultra derecha pro yanqui del Parlamento Europeo pretende sancionar a Cuba por la supuesta violación a los derechos humanos, sin embargo, no se pronuncia a favor de sancionar a Colombia por las 84 masacres perpetradas el año 2020 y otras 6 hasta el24 de enero de 2021, ejecutadas por fuerzas paramilitares amparadas por el régimen de Iván Duque, estrecho cófrade de los Estados Unidos.

Un informe reciente de la Oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, reconoce esos crímenes, entre los que hay 19 niños, 12 mujeres y más 352 personas asesinadas, muchas de ellas líderes sociales.

¿Cuándo se han producido tales crímenes en Cuba?

Ni un solo contrarrevolucionario asesinado o desaparecido en 62 años de Revolución.

¿Por qué Dita Charanzová, no adopta similar posición contra el gobierno de Sebastián Piñera, por sus permanentes violaciones de los derechos humanos en Chile, donde los carabineros disparan contra jóvenes que reclaman justicia social, trabajo, mejor educación y eliminación de las desigualdades?

¿Lo que sucede en Perú y Guatemala con el personal de la Salud no le preocupa a la Europarlamentaria?

¿Dónde está su conciencia ante el panorama sanitario que sufre el pueblo de Brasil, ante la falta de sensibilidad del régimen de Jair Bolsonaro, donde no alcanzan los cementerios para enterrar los cadáveres?

¿Cuáles fueron sus propuestas de sanciones contra el régimen de Lenin Moreno en Ecuador, por no tener programas efectivos de salud, que dieron como resultado que los enfermos por la Covid-19 murieran en plena calle sin asistencia?

¿Qué resolución aprobó contra el gobierno de Donald Trump, ante el pésimo manejo de la pandemia, que convirtió al país más rico del mundo en el mayor contagiado y con más muertes en todo el planeta?

Mucha hipocresía y cinismo hay en la checa Charanzová, combinado con su odio contra un pequeño país, que defiende su sistema socialista que posibilita ocuparse de todos sus ciudadanos, mantener un fuerte sistema de salud, de educación y de seguridad social que no deja desamparado a nadie, a pesar de las 242 sanciones impuestas por Estados Unidos solo en 2020, algo que tampoco parece importarle a esta mujer que se desvive por complacer a sus jefes yanquis.

Exacto fue José Martí cuando dijo:

“Se considera criminal el querer forzar a la opinión pública”