Washington, 26 ago (Prensa Latina) La congresista demócrata Barbara Lee calificó de obsoleto y dañino el bloqueo de Estados Unidos contra Cuba y dijo que trabajará por lograr una política más inteligente y humana hacia el país caribeño.

Miembro del Cámara de Representantes por California desde 1998, Lee recordó que ha desplegado sus esfuerzos en la política de los Estados Unidos hacia la naciòn antillana durante cuatro décadas, y que está comprometida con el levantamiento del “fallido embargo (bloqueo) a Cuba”.

“Estados Unidos debe apoyar los esfuerzos del pueblo cubano para construir una Sociedad pacífica y próspera, que pueda satisfacer las esperanzas y necesidades del pueblo cubano. Y vemos al pueblo cubano organizándose para lograrlo», subrayó la presidenta del Caucus Negro del Congreso (2009–2011) en un comunicado.

“Pero la política de Estados Unidos sigue basándose en la idea de que castigar a los cubanos es de alguna manera ayudarlos”, advirtió al recordar que durante el gobierno de Barack Obama (2009-2017) se adoptaron algunas medidas importantes “para repensar nuestra estrategia hacia Cuba”, acotó.

Sin embargo, el gobierno de Donald Trump (2017-2021) “no solo deshizo esas medidas, sino que amplió el embargo, acusando a Cuba de ser un Estado patrocinador del terrorismo”, añadió Lee al expresar su agradecimiento para participar en un evento sobre la política de Washington hacia la nación antillana.

Comentó que el presidente Joe Biden ha adoptado “una serie de medidas pequeñas, importantes y positivas”. “Hemos comenzado a hablar nuevamente con el gobierno cubano sobre temas de interés mutuo, como la migración y la aplicación de la ley. Hemos aumentado nuestra presencia diplomática y consular, y hemos tomado medidas para alentar los viajes y el comercio”.

Para la legisladora “estos pasos siguen siendo solo cambios simbólicos en una política que continúa aislando y castigando al pueblo de Cuba. Después de seis décadas de fracaso, ya es hora de que Estados Unidos intente algo diferente”, porque al final es el “el pueblo cubano el que está pagando el precio”.

La representante Lee recalcó que trabajará “para crear una política estadounidense más inteligente y humana hacia Cuba”.

El levantamiento del bloqueo económico, comercial y financiero a Cuba es un reclamo aún no escuchado por los gobiernos de la Casa Blanca tanto demócratas como republicanos.

A esa política de asfixia se sumó, en 2021, la reinclusión de Cuba en la arbitraria lista de Estados Patrocinadores del Terrorismo (SSOT por su sigla en inglés), una decisión que tomó el entonces presidente republicano Donald Trump días antes de concluir su mandato.

Pese a la promesa de hacer cambios en la política hacia Cuba, el actual presidente demócrata, Joe Biden, a unos cinco meses ya de terminar su periodo en el Despacho Oval, no solo sigue la línea del bloqueo reforzado sino también mantiene la designación de SSOT.

Una política estadounidense humana hacia Cuba

Honorable Barbara Lee, miembro del Congreso. Salida hacia reunión de Chicago para exigir que Cuba sea eliminada de lista SSOT.

21 de agosto de 2024

Gracias por la invitación a participar en su evento sobre la política estadounidense hacia Cuba. Lamento no poder unirme a ustedes en persona esta noche, pero agradezco la organización y el liderazgo de los muchos activistas comprometidos en esta sala, que trabajan para poner fin al obsoleto y dañino embargo estadounidenses a Cuba.

He estado trabajando en la política de los Estados Unidos hacia Cuba durante cuatro décadas, desde que fui participante del difunto y gran Ron Dellums. Como copresidente del Grupo de Trabajo sobre Cuba de la Cámara de Representantes, estoy comprometido a poner fin al fallido embargo a Cuba.

Estados Unidos debe apoyar los esfuerzos del pueblo cubano para construir una Sociedad pacífica y próspera, que pueda satisfacer las esperanzas y necesidades del pueblo cubano. Y vemos al pueblo cubano organizándose para lograrlo, en el espacio político, el espacio cultural e incluso el espacio económico.

Pero la política de Estados Unidos sigue basándose en la idea de que castigar a los cubanos es de alguna manera ayudarlos. El presidente Obama tomó medidas importantes a partir de 2014 para repensar nuestra estrategia hacia Cuba. Pero la administración Trump no solo deshizo esas medidas, sino que amplió el embargo, acusando a Cuba de ser un Estado patrocinador del terrorismo.

Vemos el fracaso de esta política al revés en todas partes. Más cubanos están huyendo de la isla que nunca antes, lo que se suma a la crisis humanitaria. En Cuba hoy, vemos un florecimiento del espíritu emprendedor como nunca antes hemos visto. Pero hasta ahora, la respuesta de demasiadas personas en Washington ha sido tratar de hacer que la vida de esos empresarios sea más difícil. ¿Tiene eso algún sentido?

La administración Biden ha tomado una serie de medidas pequeñas, importantes y positivas. Hemos comenzado a hablar nuevamente con el gobierno cubano sobre temas de interés mutuo, como la migración y la aplicación de la ley. Hemos aumentado nuestra presencia diplomática y consular, y hemos tomado medidas para alentar los viajes y el comercio.

Y hemos seguido presionando al gobierno cubano en materia de derechos humanos, e insistimos en la liberación de los presos políticos, incluidos aquellos injustamente encarcelados por las protestas de julio de 2021.

Sin embargo, estos pasos siguen siendo solo cambios simbólicos en una política que continúa aislando y castigando al pueblo de Cuba. Después de seis décadas de fracaso, ya es hora de que Estados Unidos intente algo diferente.

El esfuerzo de la administración Obama por involucrar a Cuba ofreció una esperanza real de que el pueblo cubano pudiera tener la oportunidad de finalmente determinar su propio destino, libre de la intromisión de los gobiernos de Estados Unidos o Cuba. Mientras los políticos en Washington y La Habana continúan con sus mezquinas disputas, es el pueblo cubano el que está pagando el precio.

Espero trabajar con todos ustedes para crear una política estadounidense más inteligente y humana hacia Cuba.