Javier Sánchez - Cubainformación.- Tenía que ser un 13 de abril. Mi adorado cascarrabias, corriste a tiempo hacia la luz para no poner una gotita más de melancolía a uno de tus aniversarios preferidos. Junto al 1 de Enero. Junto al 26 de Julio.


Rojo impenitente, revolucionario gruñón (¡cómo no serlo, hoy en día…!), compañero valiente y coherente. Los recuerdos se agolpan, de tantas conversaciones en La Habana, en tu penúltimo exilio, en esos patios de El Vedado. De cuando nos hablabas de aquella cena con profesionales de los medios a la que también asistió Fidel; ésa misma en la que el propio Raúl te decía (“Necesitamos que metan más caña, chico...”) que hacía falta un periodismo más revolucionario y menos timorato. Como el tuyo.

Cómo olvidar cuando (¡qué memorable artículo!) mandabas pa’ la pinga a los “Pijos en La Habana”, y el propio Abel Prieto (allá se mire lo suyo…) te pedía que te calmases y guardaras las formas. Esas que siempre te importaron un carajo.

Qué momentos, cuando nos hablabas de tus conversaciones con Silvio, o nos echabas el cuento de la bofetada a Bunbury, en el momento en que, tras contarte su capricho de hacer una versión del himno de tu tocayo Puebla al Comandante Guevara, protestaba quejumbroso por los 4 CUC que le pedían en el Hotel Nacional por un guarapo. “Calla y paga, chaval, que esto es público: tu dinero va para lapiceros, pupitres y camas de hospital”.

La maquinaria mediática, obligada por tu inigualable figura, te recuerda hoy 14 de abril, tu día, pero “sólo” por tu trayectoria televisiva y radiofónica, por tus artículos menos “amenazantes”. Tus compañeros lo hacemos por comunista indomable, por haber luchado hasta el final por un mundo mejor. Pero, cierto es: incluso tus programas musicales eran para ti una trinchera para combatir la caspa de este país. Auanbabuluba, compañero. Como a Las Vulpes, a ti también te gustaba ser un zorro, aunque implicara escándalos y dignas dimisiones; casi a la vez, por cierto, que, eurocomunismo mediante, un personaje siniestro (¿diestro?) de cuyo nombre no quiero acordarme (alto cargo en Iberia, algo más tarde, después de ganar kilos y perder ideas) conseguía que te echasen del Partido. Por rojo.

En esos patios, bajo limoneros y entre fichas de dominó, nos contabas también las reprimendas de tu hija cuando aceptaste ser jurado de esos, tus últimos concursos televisivos: “Sí mi niña, es telebasura, pero esto es para jubilarme y exiliarme a esa isla bonita”. Y allí acabaste de darlo todo: tu cariño, tu tiempo, tu ilusión, tu dinero; tu trabajo como maestro de escuela de música; hasta tu hígado, para sacar siempre los colores a algún jefe descarado y disfrazado.

Cansado y maldiciendo, siempre maldiciendo, entre Ronda y La Antilla, resististe sin tregua; desde tu tribuna en Insurgente o en Rebelión (hasta aquello…), desde las páginas de Cubainformación o de Cubadebate, desde tu propio blog “de El Tena”. Asistiendo a encuentros de solidaridad; con Cuba y con todo proceso de liberación digno que se librase en la Patria (en la Matria) Grande.

Mucho tiempo seguirán resonando esas últimas conversaciones (con “Darth Vader”, como decías tú, después de cómo te dejó la garganta ese maldito) en las que compartíamos rabia y mala leche ante tanto advenedizo prepotente, tanta progresía tan anodina como cómplice, y despotricábamos de esa especie de PSOE del siglo XXI que nos había nacido, hoy venido tan a menos y casi emitiendo soberbios estertores.

Viejo sinvergüenza, como te podría haber llamado Luis Eduardo, ese primo tuyo no tan lejano, con el que compartías algo más que aspecto. La Isla Infinita te recordará siempre. El Caimán Barbudo se queda sin uno de los suyos. Nosotros perdemos una voz siempre indómita. Pero tú sabes que ¡Venceremos!. Descansa en paz, camarada. Y Viva la República.

Opinión
Lo último
Con autoridad: Con Filo
Con Filo.- Todos en algún momento de nuestras vidas nos hemos rebelado o hemos querido rebelarnos contra algún tipo de autoridad. Hoy #ConFilo tratará precisamente sobre la autoridad, para qué se utiliza y de qué ma...
Ver / Leer más
La Columna
Tenemos tu cura
Ana Hurtado - Original en Cubadebate y Cuba en Resumen / Resumen Latinoamericano / Cubainformación...
La Revista