Pablo Soroa Fernández - Venceremos.cu.- Giorge Díaz Lorens, el Héroe del Juego en que Cuba se coronó campeón de béisbol en los Juegos Olímpicos celebrados en Barcelona, en 1992, fue despedido oficialmente del deporte activo, en su natal Guantánamo.
La hermosa ceremonia de adios tuvo lugar en el estadio Nguyen Van Troi de esta ciudad, donde cosechó muchas de sus victorias el espigado lanzador derecho, quien en aquella cita olímpica ganó dos juegos, entre ellos el decisivo por la discusión del oro, frente a Tapei de China.
Entre otros reconocimientos, Díaz Lorena recibió los de Luis Antonio Torres Iríbar, miembro del Comité Central y Primer Secretario del Partido en Guantánamo; Luis Fernando Navarro, Presidente de la Asamblea Provincial del Poder Popular, e Higinio Vélez Carrión, Director Nacional de Béisbol.
Las organizaciones de masas, organismos y entidades de la Villa del Guaso también entregaron obsequios al monticulista de 38 años de edad, quien en 10 series nacionales cosechó 70 victorias, 17 de ellas sin admitir anotaciones, permitió 3,81 carreras limpias por juego y limitó a 271 el average de sus contrarios.
El campeón olímpico confesó a la prensa sentirse emocionado por ese homenaje y por otro que lo enorgullecía aun más: el relevante desempeño en la cuadragésima serie nacional, del equipo cuyo uniforme el vistió y honró, hasta mediados de la pasada década de los 90.
Junto a Osvaldo Duvergel, su coequipero y también pitcher, este maestro de las rectas rápidas laterales y la slider, tuvo participación protagónica en el equipo Serranos que desposeyó a Industriales del título, durante la final de la Serie Selectiva de 1992, el año cumbre de su breve, pero rica trayectoria deportiva.
