Lirians Gordillo Piña - Revista Mujeres.- Para Yolanda, Damileisi y otras tantas sobrevivientes de la violencia de género, el punto de giro que las hizo detener el puño violento, alzar su voz frente al descrédito, luchar por su independencia y nunca más, nunca más volver al contén fueron: sus hijas e hijos.


“Hoy me levanto para que ellas no tengan que pasar por lo que yo pasé”; “Aguanté de todo por mis hijas y no pensaba que someterme a tanto maltrato las afectaría”; “Nunca más voy a permitir que me separen de mis hijos”.

Estos testimonios no pueden captar toda la desesperación de madres que han dormido en la calle con sus pequeñas; que las han puesto a buen resguardo con una vecina o que se reservan el dolor de una violación en el matrimonio. Pero si pueden mostrarnos la fuerza de estas mujeres, sus estrategias y motivos para reconstruir sus vidas.

Por otra parte, hablar de adolescentes e infantes víctimas de la violencia de género (de forma directa o indirecta) también da cuerpo al dolor y la vergüenza más profunda de tener otra generación marcada por un flagelo que aún no hemos podido detener.

Vi a Keila acercarse al micrófono y con apenas 16 años contar lo triste que fue separarse de su mamá cuando era pequeña. Dailsy rompe a llorar cuando recuerda el estigma que vivió en su escuela, mientras su hermana adolescente no levanta la mirada de la mesa, cierra los ojos y canta.

Estas adolescentes son hijas de sobrevivientes de la violencia de género, cubanas que hoy educan a sus hijas desde los aprendizajes más duros y con las heridas más profundas, esas que a todas nos entrecortan la voz.

Llegar a la Corte de Mujeres por la Solidaridad, la Equidad de Género y la Justicia Social marcó para las testimoniantes un momento significativo en el proceso de sanación. Pero, además de ser un ejercicio personal la Corte es también un proceso grupal y social que busca “visibilizar y concientizar la resistencia y creatividad cotidiana de las mujeres en su lucha contra el patriarcado y por la justicia social”.

El pasado sábado 30 de enero se celebró la octava Corte de Mujeres que organiza el Grupo de estudio Sobre América Latina (Galfisa) junto a líderes del Consejo Popular Colón del municipio Centro Habana y otras organizaciones sociales y comunitarias.

Gracias a este espacio pude conocer a adolescentes de estos tiempos. Muchachas románticas y que también conocen “el rostro duro de la calle”. Como un espejo ellas nos devuelven los retos que debemos resolver en el presente para que el futuro se parezca mucho más a sus sueños.

Keila sueña con ser médico veterinaria pues le gusta “cuidar y curar a los animales”. Dailsy hoy estudia técnico medio en confecciones textiles, está feliz y enamorada, sueña con ser gastronómica.

Género
Mesa Redonda.- Como homenaje a Vilma Espín, en el aniversario 90 de su natalicio, Cubadebate enfoca su espacio en la Mesa Redonda de este martes al mostrar la participación en la batalla y los desafíos de la mujer cubana frente a...
Canal Caribe.- Este 7 de abril, cumpliría 90 años la Heroína de la Sierra y el Llano, #VilmaEspín Guillois. El pueblo cubano recuerda su impronta y ejemplo....
 Laura V. Mor (Fotos: Yaimi Ravelo) - Resumen Latinoamericano Corresponsalía Cuba.- “Rescatar la memoria histórica femenina” es el objetivo que llevó a la artista y cineasta cubana Marilyn Solaya a encarar el pro...
Lo último
La Columna
Cuba otra vez en la calle... desistan ya!
CUBA No Es Miami.- Tanto lo pidieron que se les hizo realidad... creo que es hora de desistir... los cubanos se tiraron a la calle! Aquí solo la evidencia de la capital cubana... pronto tenbremos más... Dale play #cubanoesmiami Suscr&ia...
La Revista