Norelys Morales Aguilera/Blog Isla Mía/Cubainformación.? Al firmar un acuerdo entre la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (Etecsa) y Google este lunes 12 de diciembre, para ofrecer el servicio de Google Global Cache, queda en evidencia que no ha sido la Isla la que ha provocado la baja velocidad de conexión para los cubanos.
El acuerdo rubricado por los presidentes ejecutivos de Google y de Etecsa, Eric Schmidt y Mayra Arevich Marín, respectivamente, permitirá utilizar la tecnología del gigante tecnológico, para dar una mayor velocidad y calidad de las prestaciones y la optimización de la red internacional de Etecsa, y por ende, reducir el tiempo de respuesta al entregar localmente algunos de los contenidos más populares y de mayor ancho de banda, como los vídeos YouTube.
La información fue publicada en el blog corporativo de Google (https://blog.google), según varias agencias internacionales, ya que, es imposible desde Cuba leerlo en la bitácora de la compañía norteamericana, que ha cumplido las leyes bloqueadoras de su país. O sea, que la empresa sigue "regalando a los cubanos sus cartelitos". Esto no lo hacen notar agencias tales como Efe, AP y AFP, consultadas para elaborar este post.
Fue en 2014, cuando por primera vez se pudo acceder desde la Isla a Google Chrome, Google Play y Google Analytics. Dicho texto revela, además, que hace un par de meses también se pusieron algunas extensiones y temas gratuitos a disposición en el Chrome Web Store.
Bienvenido este acuerdo antes de que los trumpistas hagan de las suyas, como no descarta una mayoría en la Isla, dadas las declaraciones del presidente que está por asumir, y los personajes que ya ha nombrado para su gabinete, además de un congreso que les favorece, y que tendría facultades pero, no desea derogar el bloqueo a Cuba.
La declaración conciliadora de Google dice que: “Todos estos proyectos se relacionan con los valores más esenciales para Google: lograr que toda la información del mundo sea accesible y útil para todos, sin importar los costos, la conectividad o las barreras del idioma”.
¿Por qué antes no lo hicieron? Es casi retórica la pregunta si nos damos cuenta de que el bloqueo de Estados Unidos está intacto y la poderosa compañía norteamericana radicada en California, no habría querido correr riesgos de ser penalizada con altas multas, de acuerdo con las leyes norteamericanas vigentes aún. Pero al parecer desean aprovechar, al menos la disminución de cierto efecto intimidatorio, propiciado el acercamiento y las negociaciones con Cuba de la administración Obama, aunque durante la misma se produjeron excesivas penalizaciones a entidades que tuvieron contactos comerciales o finacieros con la Isla.