Por Arthur González*/Martianos-Hermes-Cubainformación.- El acto terrorista ocurrido hace unos días en Colombia y la supuesta autoría del ELN, dando pie a la reclamación del presidente Iván Duque de que Cuba entregue a los miembros de la delegación que negocia la paz, es algo realmente extraño.

Por Arthur González*/Martianos-Hermes-Cubainformación.- Todos los días funcionarios de la Casa Blanca, del Departamento de Estado y la gran prensa plana y televisiva de Estados Unidos, ejecutan críticas y campañas contra dirigentes y países del Sur, a pesar de que los yanquis tienen el techo de cristal.

Por Arthur González*/Martianos-Hermes-Cubainformación.- A poco más de una semana del cierre del gobierno de los Estados Unidos por falta de fondos, se percibe un caos en la sociedad yanqui.

Por Arthur González*/Martianos-Hermes-Cubainformación.- Fabricada por Estados Unidos en los primeros meses de 1960, la contrarrevolución en Cuba ha pasado por muchas etapas, pero en todas, el dinero yanqui ocupa el motor principal para la conformación de pequeños grupúsculos, que mueren en el transcurso de los años por las luchas internas para alcanzar protagonismo, rivalidades por el dinero, la penetración de la Seguridad del Estado cubano, las mentiras que trasladan a sus amos norteamericanos, y esencialmente por la ausencia de apoyo popular.

Por Arthur González*/Martianos-Hermes-Cubainformación.- ¿Quién no recuerda las mentiras construidas en Washington contra Cuba desde el mismo año 1959?

Por Arthur González*/Martianos-Hermes-Cubainformación.- Desde el ascenso de Hugo Chávez al poder, Estados Unidos inició sus acciones para derrocarlo al no acepta un gobierno más con tendencias socialistas en América Latina, región considerada desde el siglo XIX como su patio particular. La historia recoge decenas de golpes militares organizados desde Washington, invasiones y planes desestabilizadores diseñados y ejecutados por la CIA, contra países latinoamericanos que no eran de su agrado.

Por Arthur González*/Martianos-Hermes-Cubainformación.- Acostumbrados a las mentiras, a los gobernantes yanquis no les importa que pasado un tiempo la verdad les salte en la cara, demostrando como falsean la verdad cuando pretenden alcanzar un objetivo concreto.