Para el dignatario es vital en estos debates la participación de todos los sectores sociales, expertos, ministros de Estado, viceministros y autoridades departamentales, incluso aquellas que se oponen al actual proceso de cambios.

La víspera, tras concluir casi 12 horas de deliberaciones en un gabinete con formato ampliado, al que asistieron además jefes del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) en la Cámara Diputados y el Senado, el estadista anunció la creación de un Ministerio de Autonomías.

Adelantó que una vez promulgada la ley de leyes invitará por separado a los prefectos opositores de Santa Cruz (Rubén Costas), Tarija (Mario Cossío) y Beni (Ernesto Suárez) para debatir sus propuestas sobre la compatibilización de los estatutos autonómicos a la nueva carta magna.

También destacó la voluntad política para poner en marcha ese texto, pero que se necesitan más de 100 leyes para instrumentarlo, en particular la gestión pública plurinacional.

Interpelado sobre el particular, el ministro de Desarrollo Rural, Carlos Romero, dijo que la nueva Constitución representa la decisión de la mayoría de los bolivianos de apostar por el inicio de un régimen autonómico que será concertado con los nueve departamentos.

Romero opinó que la nueva norma aún requerirá de acuerdos complementarios en un marco democrático.

Por su parte, la viceministra de Coordinación Gubernamental, Rebeca Delgado, informó que se trata de concertar la instalación de autonomías de un Estado descentralizado a niveles departamental, municipal y de territorios indígenas.

Delgado explicó que este proceso trae consigo un nuevo contexto para la aplicación de la Ley Orgánica del Ejecutivo con una visión de un Estado plurinacional.