Es una moneda “nuestra” que busca “romper la dependencia del dólar, el colonialismo económico y financiero”, aseguró el líder bolivariano.
El Sistema Único de Compensación Regional (Sucre) es una unidad contable común y no una moneda material que fue adoptada en 2009 por los miembros del ALBA para sus intercambios de productos por mercancías o servicios, sin necesidad de recurrir al dólar.
En las últimas reuniones del ALBA se decidió que las primeras operaciones en “Sucres” se realizaran en enero de 2010.
ALBA, iniciativa de integración regional impulsada por Cuba y Venezuela, está integrada además por Nicaragua, Bolivia, Ecuador, Honduras, Dominica, Antigua y Barbudas, y San Vicente y las Granadinas.