Allí, se produjo un impacto emocional imprevisible para los asistentes, representantes de lo mejor de nuestro pueblo: Fidel con la voz quebrada por la emoción, como registra la crónica del hecho, leyó la ya histórica carta de despedida del Comandante Ernesto Che Guevara.
Había una ausencia en el Comité Central, como dijo el propio Comandante en Jefe, de un compañero que poseía todos los méritos y todas las virtudes necesarias en el grado más alto para pertenecer al Comité Central, y que, sin embargo, no figura entre sus miembros. "Otras tierras del mundo reclaman el concurso de mis modestos esfuerzos. Yo puedo hacer lo que te está negado por tu responsabilidad al frente de Cuba y llegó la hora de separarnos". En la misiva dirigida al propio Fidel, le daba las gracias por sus enseñanzas y su ejemplo.
En el acto, Fidel también anunció que los periódicos Revolución y Hoy, hasta entonces órganos respectivos del Movimiento 26 de Julio y del Partido Socialista Popular, se fundían para crear un nuevo diario, el periódico Granma, como órgano oficial del Comité Central del Partido Comunista de Cuba.
El Partido único tenía un antecedente; no era otro que el Partido Revolucionario Cubano, fundado por José Martí, porque "esta Revolución no se importó de ninguna parte, es un producto genuino de este país, ¡nadie nos dijo cómo teníamos que hacerla y la hemos hecho!"
"¡Hemos aprendido a escribir la historia, y la continuaremos escribiendo! Eso que no lo dude nadie", expresó el Jefe de la Revolución aquella noche histórica.
En el acto, Fidel también anunció que los periódicos Revolución y Hoy, hasta entonces órganos respectivos del Movimiento 26 de Julio y del Partido Socialista Popular, se fundían para crear un nuevo diario, el periódico Granma, como órgano oficial del Comité Central del Partido Comunista de Cuba.
El Partido único tenía un antecedente; no era otro que el Partido Revolucionario Cubano, fundado por José Martí, porque "esta Revolución no se importó de ninguna parte, es un producto genuino de este país, ¡nadie nos dijo cómo teníamos que hacerla y la hemos hecho!"
"¡Hemos aprendido a escribir la historia, y la continuaremos escribiendo! Eso que no lo dude nadie", expresó el Jefe de la Revolución aquella noche histórica.