"Cuba es un país muy bonito, pero, sobre todo, muy amigo y solidario con los palestinos", dijo el mandatario rebosante de gratitud al conocer la nacionalidad de este reportero y su medio, e invitarlo a posar para una foto mientras estrechaba su mano.
Minutos antes, Abbas había recibido en audiencia especial las cartas credenciales de tres embajadores concurrentes en los territorios palestinos ocupados por Israel, uno de los cuales fue el jefe de la legación cubana aquí, Otto Vaillant.
En la improvisada plática con esta agencia, el también líder de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) rememoró su primera visita oficial a la nación caribeña, en septiembre de 2009, ocasión en la que conoció lugares de importancia turística, cultural e histórica.
Durante la estancia de tres días, Abbas se reunió con el presidente cubano, Raúl Castro, autoridades de la cancillería y recorrió sitios emblemáticos de La Habana Vieja, donde afirmó que su visita se proponía fortalecer las históricas relaciones entre los dos pueblos.
"Estoy muy contento de estar aquí. Nuestra amistad se remonta a decenas de años en los que el pueblo cubano siempre ha estado al lado del palestino", expresó entonces el presidente del Comité Ejecutivo y Comandante General de la OLP.
Dicha organización fundada por el ya desaparecido líder palestino Yasser Arafat ha expresado tradicionalmente su oposición al bloqueo económico, financiero y comercial de Estados Unidos contra Cuba.
Los lazos entre La Habana y Ramalah, sede de la ANP en la ocupada Cisjordania, vivieron otro momento de solidez durante la reunión sostenida el 14 de enero pasado entre el primer vicepresidente cubano, José Ramón Machado Ventura, y el canciller palestino, Riad Malki.
Malki, quien también estuvo presente en el encuentro con Abbas en El Cairo, viajó a la isla y fue portador de un mensaje del gobernante para Raúl Castro en el que reconoció la solidaridad inquebrantable de Cuba con la lucha de los palestinos por un Estado independiente.