Perfeccionar los sistemas de pagos a los trabajadores, entre los reclamos del VII Congreso de los trabajadores de las Comunicaciones, la Informática y la Electrónica
María de las Nieves Galá, Alberto Monduy Cintao y Caridad Lafita Fotos: Eddy Martin - Trabajadores.cu.- Perfeccionar los sistemas de pago a los trabajadores figuró entre los reclamos de los delegados al VII Congreso del Sindicato Nacional de los Trabajadores de las Comunicaciones, la Informática y la Electrónica, cuyas sesiones finales se realizaron en La Habana, presididas por el Comandante de la Revolución y titular del Ministerio de la Informática y las Comunicaciones, Ramiro Valdés Menéndez y el secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba, Salvador Valdés Mesa.
En la actualidad, 28 empresas del sector aplican esos sistemas de pago, pero una parte de ellos mediante indicadores generales, en algunos casos sin discutir con los obreros y carentes de estudios previos de organización del trabajo, señaló el informe a la cita.
Los participantes sugirieron implantar sistemas más específicos, que respondan a las características de cada puesto laboral, como vía para una renumeración justa y elevar la productividad del trabajo.
Abogaron, además, por incrementar el número de entidades en perfeccionamiento empresarial, ya hoy son solo cinco de un potencial de 20, entre otras causas, por deficiencias en la contabilidad o en el control interno.
El perfeccionamiento empresarial ofrece la posibilidad de un salario mayor a partir del aumento de la producción y la eficiencia, destacó Valdés.
Otro planteamiento fue eliminar deficiencias en la emulación, entre ellas el insuficiente rigor de las evaluaciones del desempeño, responsabilidad que recae en las administraciones, y distorsiona otro de los instrumentos que contribuye a mejores resultados productivos.
A la influencia del ejecutivo sindical dedicó sus palabras Isabel García, de Artemisa, quien precisó que en la afiliación la dirección del sindicato es la mayor responsable.
Armando Delgado, del Secretariado de la CTC, afirmó que la afiliación va más allá de la cotización, de estar al día: es atender bien al afiliado, priorizar a los centros estratégicos y visitarlos constantemente de tener dificultades, pues todavía hay inventos que limitan la gestión directa del cuadro y desvía su fondo de tiempo, el cual debe dedicar al trabajo sindical.
La preparación de la asamblea de afiliados, a veces no la hacemos bien, señaló Camilo Díaz, de Correos de Santiago de Cuba. Eso desmotiva a los trabajadores que son los que realizan el trabajo y con sus resultados dan vida a la emulación.
La emulación, indicó Salvador Valdés, es para desarrollar conciencia y sentido de pertenencia. Anunció que la CTC va a realizar al respecto un estudio entre los trabajadores, para conocer si es necesario cambiar las categorías y su adecuación a las características de cada sector y al objeto social de la entidad.
Uno de los delegados llamó a eliminar la práctica de elaborar planes cómodos o extremadamente cautelosos, que ocultan las potencialidades; y los impuestos desde “arriba”.
“La planificación —dijo— debe corresponder con la realidad, pues al trabajador lo mismo lo desestimula un plan fácil que otro incumplible o utópico” y añadió: “Cuando el plan es impuesto, y luego ocurre un incumplimiento aparece el descontento en el colectivo”.
Salvador Valdés Mesa destacó la importancia del ahorro, sobre todo de los portadores energéticos, y puntualizó, que el movimiento sindical tiene que convertirse en protagonista en esa tarea.
El Comandante de la Revolución, Ramiro Valdés Menéndez, destacó en la clausura, lo útil de la cooperación y labor mancomunada del sindicato y la administración. Expresó que, mediante este binomio se concretan los intereses globales de la sociedad socialista y los particulares de los trabajadores.
Refiriéndose a las intervenciones del Presidente cubano, General de Ejercito, Raúl Castro, en las sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular y el 26 de Julio en Camagüey, expresó: “Lo primero que debiera salir de este Congreso es la idea de que todos los dirigentes sindicales, todos los cuadros de dirección de este sector y me incluyo por supuesto nos propongamos estudiar a fondo estas orientaciones y líneas de trabajo, revisemos a la luz de ellas lo que hacemos y cómo lo hacemos, y derivemos finalmente los programas de acción requeridos en cada una de nuestras áreas”.
“Lo dicho por Raúl es una guía, contiene directivas muy claras, pero no nos releva del deber de analizar con sentido crítico nuestras propias realidades y dificultades. Más bien, nos incita y obliga a una reflexión mucho más profunda e integral”, acotó.
El Congreso eligió al nuevo Comité Nacional y a su Secretariado, que a su vez ratificó como secretaria general de ese sindicato, a Milagros Vallés Silot.
Ganar protagonismo y combatividad
Para Zenón Baños Prieto, el trabajo es su gente de Calimete, Matanzas, a ella le dedica las mejores horas del día y si es necesario también de la noche. En el Correo Amarillas, donde cumple su labor como cartero, puede faltar la luz, pero no la presencia de quienes deben repartir las cartas, la prensa o entregar el pago a los pensionados y jubilados.
Cuando conversé con él, durante uno de los recesos del Congreso trataba de entender el porqué de los problemas que hoy se dan en las oficinas de Correos, una de las esferas más cuestionadas por la población, y que fue motivo de análisis durante el evento. Y el experimentado trabajador destacó tres elementos importantes en cualquier oficio: ética, honestidad y responsabilidad.
En los últimos años, la calidad de los múltiples servicios que brindan a la población las entidades pertenecientes al Ministerio de la Informática y las Comunicaciones (MIC), ha mejorado, no por obra del azar, sino como el resultado de las múltiples inversiones realizadas en este amplio sector.
Cada vez son menos las quejas en una oficina de ETECSA, o que las personas en zonas distantes de la Isla se lamenten por no acceder a la señal de televisión. Sin embargo, existe conciencia, tal como se reconoce en el informe presentado ante los delegados, de las carencias materiales que en la actualidad afectan a Correos, y que inciden en no poder contar con una fuerza de trabajo estable. Pero ello no justifica el uso indebido de los fondos de alguna unidad, la violación de los principios y normas de la contabilidad, el incumplimiento de la disciplina financiera, el robo y expoliación de los bultos postales y la venta ilícita de la prensa.
Como señaló Raidy Molina, de Holguín, en una de las comisiones que sesionaron durante el Congreso, la expoliación de los bultos postales ocurre ante nuestros ojos y no nos damos cuenta. Falta control y acción de todos los trabajadores y el sindicato.
Agustina Cabrera, de la Empresa Correos en el territorio guantanamero, se refirió a que en su provincia han logrado controlar el robo de los bultos. “En el departamento de clasificación se trabaja 12 horas. Siempre está presente el inspector, y no se abre o se cierra un paquete sin su presencia”.
El tema del delito no esta circunscrito solamente a la Empresa de Correos, como lo demuestra el uso indebido de los correos electrónicos y de las cuentas para el acceso a Internet y robos en planta exterior en la telefonía.
Ante esos hechos, el enfrentamiento no se hace con la energía y la sistematicidad necesarias. Tampoco el sindicato utiliza adecuadamente los instrumentos y vías que existen para actuar en el momento correcto.
En el período 2006-2007 se realizaron por el MIC 265 auditorías, y de ellas, 80 fueron evaluadas de deficiente o mal. Los delegados reconocieron que, muchas veces las auditorías se realizan, y los resultados no son dados a conocer a los trabajadores. La falta de protagonismo y combatividad de los dirigentes en las secciones sindicales atenta contra su papel.
Jorge Luis Dorta, vicejefe del Departamento del Comité Central que atiende la rama del Turismo, Transporte y Comunicaciones, acotó que se está más preparado para sancionar que para prever. “Prevenir es discutir en las asambleas, decir dónde están las debilidades y plantear cómo se van a resolver las dificultades”.
Si algo se apreció en este Congreso es que todos conocemos los problemas, sabemos cuáles son sus causas, y que es hora de pasar de las descripciones a la acción para solucionar las insuficiencias.
