Gloria Delucchi - AFP.- El gobierno de Estados Unidos no apoya la reelección del secretario general de la OEA, el chileno José Miguel Insulza, quien aspira a ser reelegido en el cargo el próximo año, revela el domingo el diario ultraderechista chileno, El Mercurio.

De acuerdo a la versión, que cita fuentes en Washington y en Santiago, la secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, le ha manifestado en dos oportunidades al gobierno que no apoya la reelección de José Miguel Insulza a la cabeza del organismo continental.

La razón para no apoyar al diplomático chileno, sería la postura que éste mostró en torno al reingreso de Cuba a la Organización de Estados Americanos (OEA) durante la Asamblea General del organismo en Honduras en junio.

"Clinton vio con preocupación las gestiones personales de Insulza para conseguir que Cuba fuera reincorporada sin condiciones. Estados Unidos, por el contrario, intentó vincular el levantamiento de las sanciones con exigencias democráticas", señaló el diario.

El reingreso de Cuba a la OEA fue aprobado el 3 de junio por aclamación, durante la Asamblea General de la OEA desarrollada en Honduras. La Habana fue marginada del organismo en enero de 1962. La resolución fue aprobada un día después de que Clinton abandonó Honduras para acompañar al Presidente Obama a una gira por el Medio Oriente.

Según El Mercurio, Clinton advirtió en Honduras a la delegación chilena que "EEUU no ve con buenos ojos una reelección de Insulza", cuyo período de cinco años concluye en mayo de 2010.

La Presidenta Michelle Bachelet aprovechó su visita oficial a EEUU para lanzar la candidatura de Insulza para un segundo período en la OEA. "Mi gobierno apoya decididamente la continuación del esfuerzo y del visible aporte a la región", que ha realizado Insulza a la cabeza de la OEA, expresó Bachelet.

El Mercurio dijo que "fuentes vinculadas al secretario adjunto para Asuntos Hemisféricos, Thomas Shannon, afirman que Clinton otra vez se comunicó con el gobierno chileno, justo antes del viaje de la Presidenta, para reiterar que no apoyará a Insulza".

El canciller chileno, Mariano Fernández destacó en junio "el excelente papel" desempeñado por Insulza en la OEA e informó que "ya se ha iniciado el trabajo destinado a obtener el apoyo correspondiente para estos efectos".

Fernández recordó el trabajo de Insulza por modernizar la OEA, "promover la democracia, la paz y la defensa de los derechos humanos en la región y colaborar en la solución de problemas políticos específicos muy importantes", como la reducción de las tensiones entre Colombia y Ecuador y el impulso del diálogo en Bolivia.

No obstante, Insulza ha recibido fuertes críticas por su papel tras el golpe militar que derrocó al presidente hondureño, Manuel Zelaya. Centros conservadores de EEUU critican sus "coincidencias" con los países del ALBA y grupos opositores le reprochan no intervenir con igual fuerza en violaciones a la democracia en Venezuela, Nicaragua o Bolivia.

Pecados de acción y omisión le atribuyen a José Miguel Insulza tras su enérgica pero cuestionada respuesta durante los primeros días de la crisis de Honduras. De acción, ya que sus principales intervenciones al mando de la OEA coinciden con los mismos intereses del ALBA, como la restitución del hondureño Manuel Zelaya o la reincorporación de Cuba a la OEA y de omisión, por no haber tenido esa misma fuerza a la hora de condenar las supuestas políticas "antidemocráticas" ocurridas en naciones de esa alianza bolivariana.

Insulza se refirió a las críticas surgidas en su contra por la crisis en Honduras, en una entrevista a El Mercurio. Allí rechazó que haya sido intransigente o que haya tenido una postura "ideologizada" aludiendo a su militancia socialista. "Como en todos los problemas que he manejado en la OEA siempre ha habido este tipo de críticas, pero no me siento amenazado como secretario general, así que eso no ha sido una consideración mía", dijo.