Noel Manzanares Blanco - Cubainformación.- Este ocho de Junio apareció Cuba Inc se abre al capital extranjero, pero con límites, responsabilidad de Daniel Trotta y Marc Frank, de Reuters. Los autores, afincan sus razonamientos a partir de un diálogo entre Philippe Pouletty, médico francés fundador de la empresa de biotecnología Abivax que está trabajando en estrecha colaboración con el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de Cuba, y Fidel Castro Díaz-Balart, asesor científico de las autoridades de la Isla, a saber:


Según el despacho de la agencia británica, Pouletty manifestó “medio en serio y medio en broma, que tenía una propuesta capitalista” (la idea de colocar una empresa en la bolsa de valores en el mercado paneuropeo Euronext con el Estado cubano como accionista); y que ante ello, Castro Díaz-Balart expresó que “eso es realmente muy interesante, pero si usted quiere que lleguemos a un acuerdo rápidamente, ese no es el camino más rápido. Es un par de años antes de tiempo”.

Reuters certifica que Abivax acordó comprar por adelantado a Cuba las vacunas a un precio predeterminado y pagar regalías cuando el producto esté en el mercado; que la experiencia de Pouletty ofrece un vistazo a la mentalidad de la Cuba Inc; y que convencido de que el país necesita capital, los líderes cubanos le están dando la bienvenida a los negocios bajo una ley de inversión extranjera aprobada hace un año, “pero quieren un estricto control sobre el ritmo del cambio” o sea, que no nos pasen “gato por liebre” —incorporo, en buen cubano.

Es lo mismo que encontré en las pretensiones de Madrid frente a La Habana, de acuerdo con José Manuel García-Margallo, ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación de España, quien en su última visita a la Mayor de las Antillas dijo refiriéndose a su país como ejemplo para el nuestro: “Por fortuna, aquello [la Dictadura que hubo en la Madre Patria —y recuerde cómo nos perciben desde el Capitalismo de pura cepa] pasó. Y hoy puedo decir con orgullo que la Constitución que entonces diseñamos nos ha permitido disfrutar de cuarenta años de paz civil, libertad y prosperidad. Años en que los centristas, los socialistas y los populares nos hemos alternado con absoluta normalidad” —las negritas son mías.

A la sazón, pregunté: ¿De qué está hablando este ministro español? ¿Cuál es el estado de su “paz civil, libertad y prosperidad”? ¿Le habré mentido a mis lectores/as cuando seis años atrás publiqué Adiós al “estado de bienestar social” con una fotografía alegórica a las privatizaciones del estado español? ¿Por qué ha surgido en este tiempo Podemos, esa emergente organización política de España que en sus diez propuestas incluye la prohibición de que empresas con beneficios despidan a gente, la introducción de la jornada laboral de 35 horas, la redistribución de los sueldos de manera más justa, la reestructuración de la deuda o la eliminación de los hospitales privados para regresar a un sistema de salud controlado completamente por el Estado?

No obstante, me permito compartir con mis lectores/as Los expertos avisan de que el Estado de Bienestar es insostenible con el actual nivel de recaudación, un reporte de Europa Press fechado en la capital española este nueve de Junio destacando, entre otros comentarios, que quien “fuera director general de Tributos entre 2008 y 2011, Jesús Gascón, rechazó la posibilidad de rebajar más el gasto público sin incurrir en mayores tasas de pobreza y exclusión social, y se mostró partidario de cerrar la brecha por la vía de los ingresos corrigiendo un sistema tributario 'poco eficiente' en el que hay una excesiva fiscalidad sobre el trabajo”.

Es decir, esos expertos reconocen que va cuesta abajo el “estado de bienestar social”: si después de terminar la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) el Capitalismo en su versión desarrollada hizo común servicios de salud y educación gratuitas, jornadas laborales de menos de ocho horas, subsidios por desempleos… es decir que se asistía a un apreciable y deseable incremento del nivel y la calidad de vida de las mayorías de personas de esas latitudes; hoy día aquellas bondades (con y sin comillas) cada vez más son cosas del pasado, ihasta en el mismísimo Japón! —por apenas hacer esta referencia.

Entonces, acredito que cuando se escribe que nuestro país “se abre al capital extranjero, pero con límite” hemos de interpretar que la esencia del asunto radica en cuidar la médula Humanista de la Revolución en todo el archipiélago nacional, cual muestra de que La Habana —aludo a las autoridades política-administrativas de mi nación— lucha por garantizar un bienestar posible/digno en el pueblo cubano, al margen de obstáculos foráneos e internos. He aquí el porqué sostengo que los mencionados expertos españoles aclaran a Reuters, a propósito de su despacho a partir de las relaciones entre la empresa de biotecnología Abivax y el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de Cuba.

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