Consejo Español en Defensa del la Solidaridad y la Paz - Cubainformación.- El pasado día 10 de Marzo el Parlamento Europeo aprobó una resolución a propuesta del Grupo Parlamentario Popular Europeo en relación a la “situación de los presos políticos y de conciencia en Cuba”, con los apoyos de los parlamentarios socialdemócratas, del grupo liberal y de los “verdes” europeos comandados por el tránsfuga Raül Romeva.
En dicha moción, el Parlamento Europeo condena “enérgicamente” la muerte del “disidente político” Orlando Zapata, así como las “detenciones preventivas de activistas y el intento de las autoridades cubanas de impedir a la familia de Orlando Zapata Tamayo celebrar sus funerales”.
De igual forma, se solicita la “libertad inmediata e incondicional de todos los presos políticos y de conciencia” en Cuba, expresando su interés por la situación de los presos que se habrían puesto en huelga de hambre tras la muerte de Orlando Zapata, y en particular por Guillermo Fariñas.
Finalmente dispone que “se intensifique las medidas pertinentes para exigir la libertad de los presos políticos y promover y garantizar el trabajo de los defensores de los derechos humanos”, así como instar a las instituciones europeas “a que den apoyo institucional y aliente sin reservas el inicio de un proceso pacífico de transición política hacia una democracia pluripartidista en Cuba”.
Ante esta resolución, desde el Consejo Español en Defensa de la Solidaridad y la Paz queremos declarar:
1.- Que en primer lugar, como ha quedado de manifiesto en diversas informaciones y foros, el preso Orlando Zapata Tamayo no puede ser calificado como “preso de conciencia”, al tratarse de un preso común que durante su estancia en prisión ha sido reclutado por la llamada disidencia interna. Así mismo lo reconoce Amnistía Internacional en sus primeros informes sobre los 75 detenidos en la primavera de 2003, donde no aparece Zapata Tamayo a pesar de encontrarse en prisión desde diciembre de 2002 y al ser detenido de nuevo en mayo de 2004 por desacato, desorden público y resistencia. Zapata Tamayo dista de ser un pacífico disidente político y posee un amplio historial delictivo con condenas por estafa, asalto con arma blanca o lesiones.
2.- Que Orlando Zapata Tamayo recibió todo tipo de atenciones médicas desde los niveles de atención primaria en el puesto médico del penal, a los cuidados intensivos realizados en el Hospital Hermanos Ameijeiras en La Habana, pasando por niveles intermedios en el Hospital Nacional de Reclusos de la Habana y en el Hospital Provincial de Camagüey, recibiendo en cada momento los cuidados medicamente necesarios, desde la alimentación parenteral y enteral hasta diálisis, ventilación artificial y el tratamiento antibiótico pertinente en los estadios más avanzados de su protesta. Podemos afirmar a la luz de estos datos que Orlando Zapata no murió debido a una mala praxis médica, ni fruto de abandono terapéutico alguno. Igualmente y a la luz de la declaración de Malta de la Asociación Médica Mundial sobre Personas en Huelga de Hambre que establece en su articulo 19 que es ético que una persona en huelga de hambre muera en dignidad en lugar de someterla a intervenciones en contra de su voluntad, podemos afirmar también que fue tratado de manera exquisita desde un punto de vista médico legal.
3.- Que nos resulta complicado aceptar el status de presos políticos o de conciencia para los aludidos por la citada resolución, al estar probado su presencia en prisión “por haber recibido fondos o materiales del gobierno estadounidense para realizar actividades que las autoridades consideran subversivas y perjudiciales para Cuba”, según Amnistía Internacional, tipo delictivo reconocido por el Derecho Internacional y que se encuentra recogido en los códigos penales de la mayoría de los países miembros de la UE. Delitos similares son castigados en España con penas de 4 a 15 años, en Francia de hasta 30 años, en Italia de 3 a 10 años o en EEUU de hasta 20 años.
4.- Que una vez más, el Parlamento Europeo se coloca de espaldas a la realidad para condenar prestamente a Cuba, sin tener en cuenta parámetros éticos, legales o médicos, aprovechando esta lamentable muerte para redoblar esfuerzos en una nueva campaña de acoso orquestada desde los lobbies anticubanos de Madrid y Miami, respaldada por el Grupo Parlamentario Popular Europeo y con la complicidad de socialdemócratas, liberales y “verdes”.
5.- Que la Unión Europea ha dejado pasar una oportunidad más para marcar una política exterior propia, plegándose a los dictados de las directrices norteamericanas en torno a Cuba. El Parlamento Europeo ha actuado en este caso, como portavoz del imperialismo en su guerra contra Cuba, y no como legitimo representante de los pueblos que componen la UE.
6.- Que la citada resolución constituye un grave atentado a la soberanía e independencia de los pueblos y naciones, violando los principios del acta de Naciones Unidas en este aspecto, al promover medidas injerencistas que pretenden influenciar la política domestica cubana o condicionar las relaciones bilaterales a las concesiones que en su soberanía haga la República de Cuba.
7.- Que entendemos la citada resolución como una nueva vuelta de tuerca en el sistema global de agresión que los países imperialistas mantienen sobre Cuba desde hace más de cuatro décadas, encabezado por el bloqueo económico norteamericano, que ha sido condenado en numerosas ocasiones por la Asamblea General de Naciones Unidas. Por lo tanto, consideramos que esta resolución se sitúa al margen de los intereses de la comunidad internacional, al contravenir los numerosos acuerdos de Naciones Unidas, el G-77, el Movimiento de Países No Alineados, Mercosur, etc. que reclaman un trato respetuoso para Cuba y el fin de la política de agresión, representadas por las norteamericanas leyes Helms-Burton y Torricelli o por la propia Posición Común Europea.
8.- Que supone un sorprendente doble rasero que diputados que aún no han condenado el brutal golpe de estado en Honduras, que solo han manifestado desinterés por el asesinato de activistas por los derechos humanos o periodistas críticos en el citado país, que diputados que no solo mantienen un silencio cómplice sino que promueven un estatuto avanzado para Marruecos, país con graves déficits democráticos que ilegalmente ocupa el Sahara Occidental desde hace más de 30 años, que diputados que promueven unas relaciones diplomáticas avanzadas con el estado de Israel, número 1 en incumplimiento de resoluciones de Naciones Unidas en su política de apartheid con el pueblo palestino, muestren ahora tanta presteza y diligencia en condenar a Cuba por unas hipotéticas practicas que son cotidianas en socios preferenciales y países miembros de la UE.
9.- Que por lo anterior, el propio Parlamente Europeo no esta éticamente legitimado para condenar a Cuba, mientras mantenga su política cómplice con gobiernos e instituciones que violan grave y cotidianamente los DDHH, que una vez más en este caso fungen como coartada para lanzar una campaña de agresión contra un país que no sigue los cánones que marca el neoliberalismo.
10.- Que queda en entredicho el papel del Gobierno de España y del Partido Socialista Obrero Español, que a través del eurodiputado Luis Yañez-Barnuevo, vinculado estrechamente al lobby anticubano de Madrid, promueve esta resolución, mientras que a través del Ministro de Exteriores Miguel Ángel Moratinos se habla del levantamiento de la Posición Común Europea, la normalización de las relaciones con Cuba y el dialogo con el Gobierno Cubano. Una vez más, el Gobierno aparece timorato e indeciso en temas de importante calado, incapaz de plasmar en iniciativas concretas sus deseos y promesas.
11.- Que aplaudimos la iniciativa del Grupo Parlamentario de la Izquierda Unitaria Europea, no solo por oponerse en la citada resolución sino por plantear una alternativa basada en el respeto a la soberanía y la independencia nacional cubanas, donde se exige el fin del Posición Común y de la política agresiva e injerencista de EEUU y la UE hacia Cuba.
Desde CEDESPAZ hacemos un llamamiento a los amigos y amigas de la paz y la verdad, a las gentes y organizaciones progresistas, al sindicalismo combativo y sociopolítico y a todos los que luchan por un mundo donde los Derechos Humanos, la paz y la justicia social no sean simple retorica, a redoblar los esfuerzos en solidaridad con el pueblo cubano, para defender la verdad que una vez más ha sido pisoteada por aquellas instituciones que dicen representarnos y por aquellos conglomerados mediáticos que se levantan hoy como adalides de la libertad de expresión, pero que no dudan en linchar mediáticamente a aquellos, que como Willy Toledo, osan a desafiar el discurso dominante.
