Cubainformación.- Este miércoles 4 de Junio, en el Hika Ateneo de la ciudad vasca de Bilbao, Eugenio Martínez Enríquez, nuevo Embajador de Cuba ante el Reino de España, ofreció un encuentro informativo con socias y socios de Euskadi-Cuba, con miembros de las asociaciones de la emigración cubana Desembarco del Granma, Sierra Maestra, ACESMA-Sierra Maestra, así como con representantes de partidos, sindicatos, colectivos internacionalistas y ONGDs con proyectos de cooperación en Cuba. También estuvo presente una representación de la Agencia Vasca de Cooperación, que viajará a la Isla en los próximos días.
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En el encuentro informal, el diplomático contestó a decenas de preguntas sobre los cambios económicos en Cuba, el futuro del socialismo, los retos y desafíos de la sociedad cubana o el papel de la emigración en la actual transformación del país.
Previamente a este intercambio, Eugenio Martínez fue entrevistado por el canal Cubainformación TV, por las emisoras Radio Popular, Onda Vasca y Radio Euskadi, por Euskal Telebista (televisión pública vasca), así como por los diarios Gara y Deia.
Eugenio Martínez cumple estos días una extensa jornada de encuentros institucionales, empresariales y sociales. El martes estuvo con el Lehendakari Iñigo Urkullu, con los representantes de las diferentes fuerzas políticas en el Parlamento vasco y con asociaciones de solidaridad como Euskadi-Cuba. Hoy jueves tiene varios encuentros en el territorio de Gipuzkoa, donde se reúne con el Presidente de Diputación Foral Martín Garitano y donde recorrerá diferentes centros de interés económico, como el Basque Culinary Center.
- ¿Por qué tantísima inquina contra Cuba en la prensa española?
- Cuba es víctima de una campaña permanente. Tenemos un sistema distinto, que rompió todo un esquema de dominación, y sigue provocando una gran preocupación en los centros de poder internacionales que, junto a la prensa que responde a sus intereses, se han propuesto presentar a Cuba como un país en decadencia, en crisis permanente, como un sistema inviable.
- Ahora que Cuba está en un profundo proceso de transformación económica, algunos de estos grandes medios interpretan este proceso como un tácito reconocimiento del fracaso económico del país. ¿En qué se equivocan?
- Fracaso es una palabra inapropiada. Cuba es una alternativa y lo ha demostrado. Por eso mi gobierno tiene el apoyo mayoritario del Pueblo. Por eso estamos ahí. Lo que Cuba ha reconocido es que esa alternativa tiene que ser sostenible, que son necesarias transformaciones que permitan mantener los niveles de seguridad y estabilidad social y política, así como mejorar los ingresos de la población con un necesario incremento de la productividad.
- Recientemente se han reanudado las negociaciones entre la Unión Europea y Cuba, después de casi 18 años de imposición de la Posición Común de la Unión Europea hacia Cuba. ¿En qué momento se encuentra este proceso?
- Cuba recibió como una buena noticia la comunicación oficial de la Unión Europea de su decisión de iniciar un proceso de negociación para un acuerdo de cooperación y diálogo político. Cuba respondió con prontitud y ya se han dado varias rondas de conversaciones. Es un proceso complejo. Esperamos que prime la prudencia, la inteligencia, el realismo político y el convencimiento de la necesidad de actualización de las políticas. Tengo la esperanza que se llegue a buen lugar.
- La emigración patriótica cubana está tomando un cuerpo importante y jugando un papel en estos momentos de la historia de Cuba. ¿Qué faltaría por mejorar en las relaciones entre el Gobierno cubano y su emigración?
- Cuba tiene total disposición para normalizar las relaciones con su emigración, y en ese sentido ha ido cumpliendo sus compromisos de ir eliminando trabas y dificultades. Hemos avanzado durante estos últimos años. Quienes revisen la historia reciente pueden darse cuenta de todo lo que se ha hecho.Todavía hay obstáculos que, muchas veces, no son de parte nuestra. Por ejemplo, a la Sección Consular de Cuba en Washington, que en 30 años no había cerrado sus servicios –incluso en etapas de atentados terroristas o de recrudecimiento del bloqueo contra Cuba– no se le permite operar normalmente con los bancos. Eso priva a la ciudadanía cubana migrante en EEUU de un servicio imprescindible para viajar a Cuba, para comunicarse con sus familiares, para hacer trámites. Eso no es culpa nuestra. Hemos hecho un esfuerzo por mantener esos servicios, pero es difícil.Hemos avanzado mucho por la plena inserción de la emigración, para que sea un proceso natural. Es un derecho de los cubanos y cubanas emigrar, como hemos confirmado con la actualización de la política migratoria a partir de enero del 2013, hemos reconocido que la emigración cubana es una emigración típica de las corrientes internacionales actuales.También decimos que el proceso de construir una Revolución, de construir el socialismo, es un proceso voluntario. No obligamos a las personas a que nos acompañen.
Esa emigración cada día muestra más cercanía a Cuba, patriotismo y apego a la defensa de la soberanía, más cercanía en apoyar al pueblo y también a su Gobierno.
- Cuba está convocando a la inversión extranjera, hay una nueva Ley. ¿Ha habido algún tipo de resquemor u opinión negativa entre personas solidarias con Cuba que plantean que se estarían introduciendo elementos de capitalismo?
- Cuba está haciendo transformaciones en su modelo, y lo hemos llamado “proceso de actualización”. Esa denominación no se usa por pura retórica, se habla de actualización porque las bases del modelo no se transforman. Cuba es un país socialista, seguirá primando la empresa estatal socialista como principal motor de la economía, pero es imprescindible que, para que el socialismo sea próspero y sostenible, captemos capital, tecnología y mercado. Hemos calculado que el porcentaje anual de inversión extranjera pudiera ser de alrededor del 10% del Producto Interno Bruto. Por lo tanto, la inversión extranjera será complementaria al desarrollo del país. Eso no quita que pudiera ser decisiva en sectores específicos.
No debemos preocuparnos. No es primera vez que Cuba tiene una Ley de inversión extranjera, ni que lidiamos con el capital extranjero. El Gobierno cubano continuará defendiendo los intereses del pueblo trabajador. En Cuba no gobernarán los bancos o las empresas extranjeras.
Entrevista: José Manzaneda
Transcripción/redacción: Mónica Oporto
