Cubainformación.- Les presentamos algunos ejemplos de las cartas a la dirección del diario Granma. A través de ellas la población interactúa críticamente con organismos y empresas vinculadas a la Administración cubana, y tienen una comprobada incidencia.

Corresponden a los días 21 y 28 de agosto de 2009.

Para seguir esta sección, pueden entrar al enlace:

http://www.granma.cubaweb.cu/secciones/cartas-direccion

Libreta de abastecimientos: mucho más que hablar

Recientemente he observado en esta sección pronunciamientos de personas sobre la posible eliminación de la libreta de abastecimientos alimenticios, lo cual me ha motivado a exponer sucintamente algunas ideas al respecto.

Cuando se habla de la libreta de abastecimientos alimenticios vigente en nuestro país desde el año 1962, nos vienen a la mente tres temas recurrentes: el primero, la canasta básica alimenticia; el segundo, el nivel de subsidios a estos alimentos normados, y finalmente, la necesidad o no del mantenimiento de este sistema de ventas reguladas.

Se define como canasta básica de alimentos a la cantidad de estos artículos, determinada en función de los hábitos de consumo de la población y de los requerimientos normativos kilo-calóricos y proteicos de la misma. La cantidad de productos alimenticios que hoy se oferta en nuestro país por la libreta de abastecimientos no satisface las necesidades de consumo para un mes, y aunque cualquier ama de casa o persona encargada de alimentar al núcleo familiar me dará la razón en esto, oficialmente se ha reconocido que estos alimentos normados cubren aproximadamente solo unos 15 días del mes (en algunos artículos, como los cárnicos, se sabe que es menos). Por lo tanto, la venta de artículos alimenticios normados por la libreta de abastecimientos no constituye la expresión de la cobertura de la canasta básica alimenticia cubana, sino más bien de solo una parte de ella. No obstante, constituye una cierta garantía de poder adquirir algunos abastecimientos necesarios para el hogar.

Es conocido que los alimentos ofertados por la libreta de productos alimenticios normados son subsidiados por el Estado cubano, y que se erogan actualmente alrededor de 1 600 millones de dólares para adquirir alimentos en el exterior. Pero vale la pena preguntarse: ¿en qué medida los subsidios a los alimentos están siendo causados por la ineficiencia de las empresas productoras y comercializadoras cubanas, la burocracia innecesaria, incluida la centralización administrativa de la producción y la comercialización, y otros males empresariales? También vale la pena preguntarse: ¿por qué nuestro país tiene que importar en la actualidad alimentos que, siendo producidos en él, antaño cubrieron las necesidades del consumo poblacional, y otros que, aunque tradicionalmente se han importado, pudieran producirse en mayor cantidad?

Pienso que es muy necesario estimular fuertemente las producciones locales de productos alimenticios, incluso cuando haya que descentralizar mecanismos administrativos de producción y de comercialización; también hay que cambiar la mentalidad del igualitarismo: el que produzca que gane lo justo, que gane bien y que se beneficie con los resultados de su ardua labor. ¡Qué importa que una gran parte de la población cubana se beneficie ampliamente produciendo alimentos; entonces tendríamos un país lleno de honrados hacedores! Tierra, brazos y voluntad sobran en nuestro país para lograr este empeño.

Con respecto al último tema, obviamente algunos no conocen y otros quizás olvidan que la libreta de abastecimientos alimenticios fue establecida en nuestro país hace 47 años con el propósito de acabar con la especulación y garantizar el reparto equitativo de los productos disponibles. ¿Estamos totalmente seguros de que si se elimina la libreta de abastecimientos alimenticios, no aparecerán de nuevo las interminables "colas" para adquirir cualquier producto, la especulación desmedida de las personas inconscientes, el florecimiento del mercado subterráneo y la inseguridad permanente sobre el abastecimiento necesario, pendiendo cual espada de Damocles sobre las familias cubanas? Creo que ningún comité de protección al consumidor sería capaz de poner coto a los desafueros e irregularidades que posiblemente se cometerían, de adoptarse la medida.

El tema da mucho más de qué hablar. Mientras no exista lo necesario para el consumo, no es posible eliminar esa garantía. La única y mejor manera de hacer desaparecer la vetusta libreta de abastecimientos de productos alimenticios en Cuba es hacer crecer la producción de estos géneros; sustituir adecuadamente las importaciones y abastecer los mercados de manera tal que la demanda poblacional de alimentos sea satisfecha sostenidamente en su totalidad, en cantidad y calidad. Solo así podremos superar el problema que hoy nos embarga y satisfacer convenientemente las necesidades ciudadanas.

J. de J. Pino González.

Sobre el bacheo de las calles

Es bueno expresar la tranquilidad que transmite el hecho de que recientemente se ha observado un mejoramiento en el mantenimiento de las principales avenidas de la capital. Al parecer se está tratando de revertir por todos los medios la situación lamentable que en este sentido veníamos arrastrando desde los albores del periodo especial y que constituían fuente de accidentalidad, descontento e incluso deterioro de nuestro parque automotor.

Las medidas no se han circunscrito solamente al mantenimiento, sino también a las correspondientes señalizaciones del tránsito y a la prohibición de parqueo en estas vías importantes. Realmente se nota un estudio consciente de la circulación vial en la capital, aspecto en el que se notaba un descuido de años que hacía que se sobreexplotasen las vías al encontrarse sus señales de tránsito detenidas en el tiempo en los que no contábamos con tanto parque automotor como en la actualidad.

Una sola inquietud me mueve a efectuar esta crítica. Tiene que ver con los pasos del proceso de mantenimiento de las calles, aspecto que también se puede decir que ha mejorado ya que en estos momentos se procede a remover las capas de asfalto antiguas para tirar las nuevas, cosa que anteriormente no se hacía y que me movía a pensar que el día menos pensado íbamos a llegar a la Luna de tantas capas de asfalto acumuladas unas encima de otras.

Afortunadamente (al menos en las principales vías de la ciudad) hemos superado esta situación y sus consecuencias, como son aceras por debajo del nivel de la calle, registros y alcantarillas como fosos en medio de la vía...en fin.

Lo que actualmente me inquieta es el hecho de que el trabajo, una vez comenzado, es dejado sin terminar durante varios días. Fundamentalmente se deja en la fase en la que, una vez removida la capa de asfalto anterior, se queda la calle con una capa de chapapote líquido que se pega en los pies de los transeúntes y dificulta el paso de la calle.

¿Es acaso lógico dejar de un día para otro la calle en estas condiciones? ¿No alcanzarán los materiales disponibles para terminar el trabajo en un solo día? ¿Son diferentes las brigadas que remueven las capas de asfalto y las que colocan las nuevas? Si es así debería hacerse por secciones (de una cuadra o dos aunque sea) para dejar la calle lista para el tránsito (aunque sea peatonal solamente) de un día para el otro, y luego al siguiente día continuar con el resto de la calle. Es cuestión de profesionalidad, respeto a la población y de humanidad.

A. Orama Munero

El hábito de lectura y la ortografía

Hace unos días, oí por el Estelar del Noticiero Nacional de Televisión una prueba realizada con miles de alumnos de la enseñanza superior para medir la calidad de su ortografía. El resultado, en un gran porcentaje, fue desfavorable.

El mal ha sido arrastrado. Algo no anda bien en los niveles anteriores. No soy especialista en esta rama, pero de lo que sí estoy seguro es de que ha faltado hábito por la lectura.

Es la lectura, posiblemente, la fuente más poderosa para practicar, repasar y consolidar la ortografía, además de los conocimientos que adquirimos a través de ella.

Recuerdo en mis años de estudiante que los profesores indicaban la búsqueda de palabras en el diccionario, los comentarios sobre algún capítulo de un libro de literatura o la caracterización de los personajes, el resumen sobre algún tema, los trabajos investigativos en los que había que valerse de los libros de textos escolares o algún otro, previamente indicado y que se podía encontrar en cualquier librería o biblioteca.

Según esta manera de proceder, podemos estar perdiendo terreno. Los trabajos investigativos no siempre se indican sobre la base de un libro escolar en manos del alumno, y estos se ven obligados a buscar otra vía. ¿Cuál? En ocasiones Encarta e incluso, Internet, indicados a veces por los propios profesores. ¿En quién recae entonces el trabajo? En los padres.

Peor aún, una vez realizado el trabajo (por los padres) se le entrega al hijo y este, se lo entrega al profesor (a), pero, ¿el muchacho (a) lo leyó antes de entregarlo? ¡Parece que no!, aun cuando se lo has advertido. No tiene ese hábito.

Nos hemos acostumbrado a que papá o mamá hagan el trabajo en computadora y lo entreguen "bonito". Proceder este que va totalmente en contra de la ortografía y el hábito por la lectura.

En mis tiempos de estudiante los trabajos investigativos había que realizarlos a mano, con la letra del alumno. Eso sí, sin borrones ni otro tipo de chapucerías. La limpieza y presentación (a mano) representaban puntos para la evaluación final del trabajo. ¡Y qué hablar de la ortografía!

M. Santana Pérez

Propuestas

¿Por qué no aplicar en las respuestas a los planteamientos de los ciudadanos en esa sección que se cumpla el principio enunciado por Raúl de la responsabilidad colateral? Así, no solo tendría que dar respuesta la entidad cuestionada, sino también sus instancias superiores en los aspectos que les correspondan.

Si eso se aplica me gustaría ver qué dice la Dirección Provincial de Transporte de la Ciudad de La Habana y el Ministerio de Transporte sobre las muy frecuentes quejas publicadas en relación con el servicio de ómnibus en la capital.

Es altamente preocupante que el enorme esfuerzo hecho por el país para mejorar este servicio se vea afectado por tanta indolencia, desidia y vandalismo.

Tirso F. Rosales Vázquez.

Cumanayagua, pueblo entre ríos, pero sin agua potable

Soy vecina de Cumanayagua, municipio de la provincia de Cienfuegos, pueblo rodeado por dos caudalosos ríos, el Arimao y el Hanabanilla, también tenemos un embalse de agua (presa) en este territorio, El Granizo, y la presa Hanabanilla que está en los límites del municipio.

Los pobladores de esta localidad en la cual resido estamos siendo azotados por una crisis de agua potable en nuestras viviendas desde hace ya 4 meses, el agua llega cada 3 ó 4 días en cantidad que no logramos llenar un par de baldes. Nos hemos dirigido a las instancias pertinentes como es el Partido donde hemos sido atendidos muy bien por la compañera que presta atención a la población, pero es que no hay respuesta alguna, la explicación que ella nos comunica es que se necesita instalar unas bombas de agua; también por nuestra cuenta hemos llamado a la oficinas de acueductos y nos dan disímiles respuestas que no son convincentes, y como es en horarios diferentes donde no está el mismo personal laborando, no hay coincidencia en las respuestas, dentro de estas se destacan algunas como:

· Debe ser una tupición en su calle.

· No hay ningún problema, todo está funcionando a la perfección.

· Mañana se resuelve.

· Es que estamos rebombeando el agua para la provincia de Cienfuegos.

· Hace falta tener una grúa para sacar el motor.

El pueblo conoce que todo esto es improvisación, falta de exigencia y de respeto a los pobladores, también sabemos que la "grúa" de la que se habla fue traída hace algunos días para hacer el trabajo y en medio de la obra no previeron y se les terminó el oxígeno para continuar las soldaduras y la grúa se regresó para la provincia de Cienfuegos.

Soy portavoz de esta dificultad que estamos atravesando los pobladores de este municipio rodeado de agua, considero que teniendo en cuenta lo que significa este preciado líquido para la vida, ya es hora que se dé solución a este problema.

O. Quintana Silverio

Sin agua, ni esperanzas...

Siendo vecinos del Barrio de la Microbrigada (calle San Carlos al final, perpendicular a Callejón Ramírez), en el municipio de Palmira, provincia de Cienfuegos, hace más de 8 años que nos hemos visto privados absolutamente de agua potable.

El sistema de agua municipal no llega a ninguno de nuestros hogares, ni tres días a la semana, ni dos, ni un solo día: ninguna vez, no existiendo otra posibilidad para abastecernos del preciado líquido. Más de dos cuadras, con más de 20 hogares, en la misma manzana, tenemos que auxiliarnos de únicamente dos bombas de agua manuales, que son particulares, están en muy mal estado y quedan muy lejos de las casas (casi en todos los casos a más de 35 a 50 metros).

En nuestro CDR, en su mayoría somos trabajadores, casi todos los hogares reciben a su membresía avanzada la tarde, cansados por la jornada laboral. ¿Es humano forzar a una ama de casa, a un adulto anciano, a un trabajador extenuado a rendirle tributo al señor cansancio, para extraer agua desde la entrañas de la tierra y luego cubo a cubo caminar doblado por el peso una y varias veces hasta suplir la necesidad de agua?

En nuestro municipio existe una empresa de perforaciones hidráulicas, que como parte del programa de construcción de túneles para la defensa del país, construyó un pozo frente a nuestro barrio a una distancia de 50 metros.

¿No se podía construir uno cerca de nuestra cuadra? Si el municipio carece del combustible, nosotros los vecinos estamos dispuestos a comprarlo. Si se necesita ayuda, nosotros estamos dispuestos. ¿Pero es tan difícil resolver este problema?

Se ha comunicado en reuniones de rendición de cuenta del delegado a sus electores, al gobierno municipal, al provincial; pasan los años y seguimos sin agua.

E. M. González González

Fosa en Pogolotti lanza un S.O.S.

Creo que velar por la salud es deber de toda la comunidad así como el cuidado del medio ambiente. Por lo que enfocándome en la higiene comunitaria quiero plantear una situación desagradable que ha venido sucediéndose en la barriada de Pogolotti.

Desde hace aproximadamente 8 meses atrás en mi cuadra, 59 esquina a 92, Pogolotti, Marianao, existen problemas con el drenaje de las aguas albañales por 59, desde 92B hasta 92 y la situación puntual es la siguiente cada vez que llueve se inundan (albañales brotando por todos los desagües, bañaderas, tazas de baño, tragantes y demás) las casas que hacen esquina, que en la concreta son las que están en el extremo final del registro por donde se evacuan todos los albañales de la cuadra. A esto le sumamos que según Aguas Negras el problema fundamental radica en una fosa que está tupida pero no se sabe ni encuentran por dónde erradicarla. Hay un patio sito en ave. 57A # 9211 % 92 y 92B (o sea al fondo de estas casas) que cuando llueve cubre todo el patio hasta más de la mitad del mismo, el vecino de esta vivienda ha recurrido a todas las instancias correspondientes al igual que todos nosotros pero persiste la situación. En este sentido algunos vecinos de 59, entre ellos yo, han reportado el problema por diversas vías (Aguas Negras, Aguas de la Habana, Acueducto y Alcantarillado, Poder Popular). Durante este periodo han venido tres carros cisterna de Aguas Negras y varios inspectores, teniendo en todos los casos una respuesta insatisfactoria puesto que la solución que dio como respuesta Aguas Negras fue la destrucción del registro (alcantarillado). Mientras tanto nosotros seguimos nadando en aguas albañales cada vez que llueve, tengo que añadir que convivo con mi nietecito de 3 años que por supuesto ante situaciones tan desagradables como esta que ya se han hecho habituales tengo que enviar a un lugar seguro en casa de unos vecinos hasta que la situación se normaliza. En la cuadra, además, residen más niños pequeños, ancianos y demás personas que reclaman una salud e higiene adecuada.

Y. L. Veliz Fernández

La ausencia de jabas en las TRD

Por motivos familiares hace 12 años viajo al municipio de Manicaragua, de la provincia de Villa Clara. Al principio lo hacía todas las semanas y después por problemas de transportación cada 15 días. Cada vez que lo hacía, por un motivo u otro tenía que visitar las TRD lo mismo de Cimex o de cualquier otra firma para adquirir algún producto. No hubo una ocasión que mi mercancía saliera de la tienda con una "jabita", al contrario si quería una, fuera de las tiendas, cualquier cantidad de personas te las venden sin ninguna dificultad.

Siempre indagaba con las dependientas cómo era posible que nunca hubiera, y las mismas no sabían responder o dar una respuesta acertada.

Es contradictorio que en este municipio exista una fábrica que es La Campana donde se fabriquen estas jabas, y en las tiendas no existan.

Pude constatar con varios vecinos del municipio que esta situación también les ha pasado a ellos y no se explican porqué.

M. A. Machado Aguilera

Los obreros calificados y la pirámide invertida

Desde niño conocí la necesidad que tienen todos en el pueblo, el campo y las ciudades, de la acción de los diferentes oficios. ¿Cómo construir una casa sin un carpintero, sin albañil, sin electricista, cómo hacer funcionar un central azucarero sin paileros, hojalateros, torneros, etc? ¿De qué forma funcionaría el transporte automotor de un país, sin mecánicos automotrices, electricistas automotrices?

Cuando en nuestra naciente y triunfante Revolución, los que concluimos la campaña histórica de la alfabetización, que demostró al mundo lo que éramos capaces de lograr todos unidos, tuvimos la posibilidad de beneficiarnos con el sistema incipiente de becas que el Gobierno Revolucionario puso a disposición de la juventud, para su capacitación y desarrollo, al llegar a mi instituto, "José Ramón Rodríguez", situado en el Vedado, en Ciudad de La Habana, especializado fundamentalmente en la enseñanza del transporte, además de formar técnicos en electricidad, maquinado y corte de metales, explotación del transporte, la matrícula del mismo estaba distribuida casi en partes iguales entre los alumnos que estudiaban técnicos medios y los que estudiaban un oficio de electricista, tornería, soldador, o mecánico automotriz. Conocí la necesidad de que las estructuras de una fábrica, un taller u obra, debían ser de forma piramidal y en aquellos tiempos se hablaba de que un ingeniero debía tener de 6 a 8 técnicos subordinados y cada técnico a 8 ó 10 obreros calificados y cada obrero calificado de uno a 5 ayudantes.

Los jóvenes que estudiaban un oficio en esa escuela no eran retrasados mentales, ni retardados escolares, ni siquiera eran los de menos aprovechamiento escolar en los centros de donde procedían, la diferencia entre uno y otro estaba en que los que querían estudiar para técnicos de nivel medio, tenían su noveno grado vencido y los que querían dominar un oficio podían ingresar en dicha escuela con el octavo grado vencido.

El tiempo pasó y desaparecieron las escuelas que formaban los oficios, todos se graduaban de técnicos, siguió pasando el tiempo y muchos continuaban sus estudios y obtenían su título de nivel superior.

¿Y la pirámide? Se fue invirtiendo. Esa problemática existe en muchos sectores, incluyendo en la agricultura. Si se profundiza en la plantilla de una UBPC (no todas desde luego), podremos observar, que de un total de 50 trabajadores, 10 trabajan en el área de servicio: comedores, combustible, limpieza, etc., 12 en el área administrativa: económicos y sus auxiliares, almacenes, choferes, etc. De 8 a 12, son técnicos en diferentes especialidades: veterinarios, agrónomos, mecánicos, etc. De 6 a 8 son funcionarios y dirigentes: el director o administrador, los compradores, jefes de área, etc. Y aproximadamente de 6 a 10, trabajan directamente con la tierra, el ganado, etc.

¿Y la pirámide? Sigue invertida. El marabú sigue ahí, las tierras improductivas siguen ahí, la escasez de albañiles, encofradores, cabilleros, torneros, chapistas y mecánicos automotrices sigue. Hay que invertir la pirámide. El obrero calificado es tan importante, que sin ellos se detiene el país.

No puede construirse un edificio con técnicos y jefes, no se hace producir la tierra con ingenieros y jefes, no se construyen piezas con diseñadores sin torneros, hojalateros, etc. La pirámide hay que situarla correctamente, de lo contrario, no se sostiene.

L. Campoalegre Sánchez

Discoteca rodante por solo 40 centavos

Hace unos días, a las 11:30 p.m. salí de la funeraria de Marianao hacia la parada ubicada en 126 y 51, Marianao. A las 12:05 a.m. aproximadamente me subo a un P5 y quedé tan impresionada al ver tanto desorden que llevo varios días con esto en mi cabeza, hasta que hoy decidí sentarme y escribirle al periódico la vivencia que tuve.

Cuando subo a la guagua, la música estaba a todo volumen. La iluminación interna de la guagua es una imitación de las discotecas, con las luces y otros aditamentos que caracterizan a estas.

Todo eso propicia la indisciplina social, desde que ponen un pie en la guagua ¡Claro, al que le guste tal desorden se siente realizado y en su medio!, pues el chofer es el que da el pie forzado para tal desorden.

La mayoría de los que iban en el ómnibus a esa hora eran jóvenes y dejaba mucho que desear su comportamiento, que a continuación les menciono:

- Cantando a toda voz la música seleccionada por el chofer.

- Los hombres sin camisas, bebiendo y fumando.

- Las mujeres bailando de rodillas en los asientos.

Me impresioné tanto al ver todo este espectáculo que decidí abandonar ese ómnibus en la parada de La Ceguera, a esperar a que pasara otro P5, sabiendo que era la hora de la confronta.

A las 12:50 a.m. aproximadamente llega el siguiente P5 y desde lejos escuché la música e iluminada toda por dentro de luces en colores, igual que la anterior, y me parecía que estaba en los carnavales y que se acercaba la carroza.

Tuve que subirme en ella pues a esa hora no tenía otra elección y me dije: al parecer es el nuevo estilo de los P5 en horas de la madrugada.

Me pregunto: ¿El consejo de dirección de la terminal de ómnibus del P5 tiene que enterarse por este escrito del desorden social que están provocando algunos de los choferes subordinados a ellos? Todo indica que ellos no están cumpliendo con su contenido de trabajo. ¿Por qué les permiten a los choferes que les hagan todas esas innovaciones a los ómnibus cuando estos son bienes materiales del Estado para el uso del pueblo?¿Cuáles son los requisitos que hay que tener para ocupar una plaza de chofer de ómnibus? ¿Estos choferes cumplirán los requisitos establecidos?

Y para finalizar diré que lo que más me preocupa, es en manos de quiénes están nuestras vidas, pues es imposible que esos compañeros que han sido seleccionados para trasladar a miles de personas, puedan conducir bien, cumpliendo lo establecido en las leyes del tránsito, cuando ellos también disfrutan de este desorden social, ya que son los que lo propician. Atentamente, una pasajera preocupada.

B. García García

Y el aire, ¿dónde está?

Históricamente en los servicentros se ha prestado el servicio de aire, incluso sin costo adicional y lo prestaba el mismo pistero, pues el aire estaba en la misma isla de las bombas de gasolina o petróleo.

Al crearse los CUPET en moneda libremente convertible, el pistero daba el servicio de aire, limpieza de parabrisas etc. Cuando la avalancha de bicicletas en el país, las mismas crearon dificultades para el expendio de combustibles y las mangueras se trasladaron fuera de la isla y se comenzó a cobrar el servicio de aire. Al convertirse todos los servicentros en Cupet y Oro Negro, entonces los pisteros dejaron de prestar todos los servicios que prestaban como una excelencia, incluyendo el de aire.

¿A qué hemos llegado? Pues a que en las condiciones actuales, con todos los servicentros Cupet y Oro Negro, el servicio de aire pagado lo presta un trabajador que no se sabe si es particular al igual que los fregadores y los engrasadores, o es trabajador del servicentro, que llega a las 9 a.m. y más tarde en la mañana y se retira alrededor de las 3 p.m. y a partir de ahí no se puede echar aire y mucho menos los domingos, que el día entero no existe ese servicio.

Yo me pregunto: ¿el socialismo está reñido con ofrecer servicios necesarios a los autos y camiones? ¿Quién le exige a ese trabajador que dé servicio? ¿Por qué no se brinda el servicio por la noche, aunque existe un letrero en todos los servicentros que dice "Horario 24 Horas"?

Pero ahora hay más, en muchas unidades que prestaban el servicio de aire restringido, como se ha explicado arriba, han suprimido el servicio de aire, como por ejemplo, el de calle 30 y 23 en Playa, Ave. 31 y 18 en Playa, Oro Negro en Playa que está antes del Túnel de Línea, este tiene un servicio de ponchera en CUC que dice 24 horas y allí estaban 2 equipos de mangueras y las quitaron, el de Zanja en la esquina de la Estación de Policía en Centro Habana¼ más.

P. L. Donéstevez Navarro

Malestar en el reparto Rosa La Bayamesa

Hace muchos años que resido en el Reparto Rosa La Bayamesa, Bayamo, Granma, y los vecinos de este barrio tenemos las siguientes Inquietudes:

· No sabemos qué es mejor, que llueva o no. ¿Por qué decimos esto? La calle 39 es intransitable, no parece ser parte de la ciudad de Bayamo. Si llueve el agua, al no existir desagüe, parece un mar, llegando incluso a penetrar a las viviendas y otras en peligro de anegarse también, existiendo varios baches que por falta de gestiones administrativas del municipio y/o Consejo Popular no han sido resueltos.

· El agua que llega por tubería es un poco salobre, que no sirve para el consumo humano y tenemos que acudir a los que la venden en la calle para beber y/o cocinar nuestros alimentos.

Todo ello es un problema viejo desde que se creó este barrio y pregunto ¿Quién nos dará solución al problema?, porque en cada rendición de cuenta del delegado se plantea el problema y la respuesta no llega.

J. L. Arzuaga Pantoja

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