Durante las conversaciones, el vicecanciller agradeció las muestras de solidaridad del Gobierno brasileño con el pueblo cubano por el azote de los huracanes Gustav y Ike, así como con su voto constante a favor del proyecto de resolución antillana en la ONU que se opone al bloqueo estadounidense contra la Isla.

Rodríguez Parrilla subrayó además, la importancia de la visita del presidente Luis Inácio Lula da Silva a la Mayor de las Antillas, en enero pasado, "cuando —dijo— establecimos numerosos acuerdos, cuya ejecución marcha bien".

Asimismo, saludó el liderazgo brasileño en muchos temas de carácter internacional. "En las nuevas circunstancias Brasil adquiere responsabilidades todavía mayores en su papel en relación con los No Alineados y en el Grupo de los 77, así como en los temas económicos y comerciales", apuntó.

Por su parte, Guimaraes afirmó que el presidente Lula dedica especial interés a los nexos con Cuba, en particular a los proyectos de cooperación, de inversión y de estímulo a las empresas brasileñas, para que vengan a la Isla a aprovechar las oportunidades de negocios.

También recordó las palabras del jefe de la diplomacia brasileña, Celso Amorim, cuando afirmó que su país quiere ser el socio número uno de Cuba y su proceso de desarrollo social, y también en las relaciones políticas.