Y para alcanzar ese objetivo, según palabras de la Doctora Isabel Moya Richard vigentes hoy, aún tenemos el reto más grande: “la batalla de lo subjetivo, derribar mitos, costumbres, creencias y estereotipos de género que se reproducen con mucha fuerza en la vida cotidiana e invisibilizan a las mujeres, las relegan a espacios privados o las representan como meros objetos sexuales”.
Según reconoció la experta en ocasión del aniversario 57 de la FMC, en esa dirección se deben intencionar esfuerzos aprovechando los espacios de toma de decisión.
Con la sagacidad y el compromiso feminista que la caracterizó, en dicho encuentro afirmó: “Nuestra meta no son cuotas o acciones afirmativas para corregir las diferencias en materia de oportunidades, queremos una transformación profunda, una igualdad real entre hombres y mujeres”.
En este sentido, el trabajo de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC) en alianza con los diferentes sectores para el logro de la igualdad de las cubanas en todos los ámbitos y niveles de la sociedad forma parte de los temas priorizados por la organización durante los próximos 5 años.
De igual forma, el proceso de modificación y perfeccionamiento del código de las familias, resultado de la reforma constitucional que protagonizó la ciudadanía cubana, es otra tarea en la cual también tiene que aportar la organización a partir de la labor de las Casas de Orientación de la Mujer y la Familia, las activistas comunitarias y las cátedras de la mujer de los diferentes territorios.