Por Laura V. Mor / Fotos: Syara Salado Massip / Resumen Latinoamericano – Cuba.


La Habana, 26 de marzo de 2023.- Josefina Vidal, Viceministra de Relaciones Exteriores de Cuba, disertó en la inauguración del XV Seminario Internacional del Instituto Superior de Relaciones Internacionales “Raúl Roa” (ISRI) sobre el proceso de acercamiento que tuvo lugar entre Cuba y Estados Unidos durante los gobiernos de Barack Obama y Raúl Castro, catalogado como “un proceso inédito” en las relaciones exteriores de Cuba.

“Se trató de un proceso efímero, pues apenas 2 años después se volvió a la confrontación abierta”, enunció, al referirse a la hostilidad, persecución y coerción económica ejercida posteriormente por la administración Trump.

¿Por qué fue posible?

Vidal explicó que el principal hecho que hizo posible ese acercamiento en el periodo diciembre 2014-Marzo 2017 en pos de normalizar relaciones entre ambos países fue que “Estados Unidos reconoció (por primera vez) al gobierno cubano como un interlocutor legítimo”, condición negada hasta entonces.

Aseguró que “Cuba fue tratada en condiciones de igualdad” y que “no se le puso condiciones”, lo que reveló el espíritu constructivo de ambas partes involucradas, además del amplio apoyo de la población cubana con que se contaba previamente.

Otro hecho importante fue el notorio fracaso de las políticas hacia Cuba durante 10 administraciones estadounidenses, que contrariamente a su objetivo de destruir la Revolución Cubana, afectó la relación de Estados Unidos con América Latina.

En este sentido, Vidal fue clara: Estados Unidos buscaba nuevas estrategias para lograr cambios internos en Cuba (los cuáles no había logrado por la vía confrontativa directa), apoyados en las transformaciones sociopolíticas que estaban teniendo lugar en el país.

¿Qué se logró y que no?

“No fue nada fácil restablecer las relaciones diplomáticas con el bloqueo en vigor“, confesó la Viceministra, al referirse a que si bien es el Congreso de Estados Unidos el órgano que legalmente puede poner fin a esta política unilateral e injerencista, el Presidente puede hacer uso de ciertas prerrogativas que de alguna manera diluyan sus efectos. Obama, a pesar del acercamiento, no lo hizo.

Si bien se lograron importantes avances como la liberación de Gerardo Hernández Nordelo, Antonio Guerrero y Ramón Labañino, la exclusión de Cuba de la lista de países patrocinadores del terrorismo, la creación de una Comisión Bilateral, la reapertura de ambas Embajadas y la firma de 22 acuerdos; el intervencionismo y la injerencia, así como el fomento a la subvención y la emigración ilegal, continuaron.

“Se mantenían intactos los presupuestos para este fin”, denunció abiertamente.

Según detalló Vidal, quedaron temas sin solución.

El desmantelamiento de una parte del bloqueo por prerrogativas del Presidente fue la principal medida sin modificaciones; pero también la ampliación de los permisos de viaje a Cuba más allá de ciertas visitas habilitadas, la suspensión de los programas de cambio de régimen al que “se siguen destinando sumas millonarias” y la devolución del territorio de Guantánamo, ocupado ilegalmente por Estados Unidos.

Vidal también se refirió a la imposibilidad de contar con relaciones bancarias directas, el bloqueo a las transacciones financieras que realiza Cuba en el exterior y a las sistemáticas prohibiciones y sanciones a empresas de terceros países que operen en la importación – exportación de productos con el país.

A pesar de ello, afirmó que “quedó demostrado que Cuba y Estados Unidos pueden coexistir“, al margen de las diferencias políticas e ideológicas que los separan.

Las lecciones aprendidas

A lo largo de este proceso histórico y a la luz de lo sucedido posteriormente por el Gobierno de Donald Trump, quién no sólo impuso el fin de la normalización con Cuba por decreto, sino que aplicó 243 medidas coercitivas con el fin de asfixiar la economía cubana (las cuáles en su esencia se mantienen durante la gestión Biden), es posible hablar de ciertas “lecciones aprendidas”.
A ellas se refirió Vidal al concluir su conferencia esta mañana.

“No basta la voluntad ejecutiva de un Presidente de Estados Unidos para asegurar irreversibilidad a largo plazo”, enunció en primer lugar. Además, se necesita un cambio de leyes base, dijo, en referencia a la Ley Helms-Burton, la cual da sustento al bloqueo económico, comercial y financiero que Estados Unidos impone sobre Cuba desde 1962.

“Los cálculos electorales de los candidatos” de los partidos políticos es otro punto relevante a tener en cuenta, aseveró; ya que de ello dependen sus acciones y posibles apoyos, en el intento de no perder votos ante el electorado en un sistema bipartidista, como lo es el estadounidense.

Se refirió también a la “contradicción fundamental” sobre la que, a pesar de la disposición del Gobierno cubano, se erige en todo intento de negociación bilateral: la pretensión de dominación por parte de Estados Unidos y la defensa irrestricta de la soberanía por parte de Cuba.

El proceso de normalización -aunque solo duró dos años- dejó “como legado un modelo de convivencia entre ambos países”, concluyó Josefina Vidal, dando por inauguradas las jornadas.

Este Seminario Internacional contará con la presencia de participantes y ponentes nacionales y extranjeros de México, El Salvador, Venezuela, Rusia, Uganda e Indonesia, según detalló su rector Rogelio Sierra.

58 ponencias y 32 exposiciones paralelas de estudiantes de Relaciones Exteriores darán forma y contenido a “Las Relaciones Internacionales en el mundo actual: desafíos y oportunidades“, un seminario cubano de reconocimiento global.

7.0-Programa-ISRI2024-Descarga

 

Consideran posible construir vínculos entre Cuba y Estados Unidos

La Habana, 26 mar (Prensa Latina) La viceministra de Relaciones Exteriores de Cuba, Josefina Vidal, consideró hoy que su nación y Estados Unidos pueden establecer compromisos para zanjar conflictos, pese al diferendo iniciado hace décadas.

Hay un camino posible para, incluso, dentro de las profundas diferencias, avanzar en la construcción de vínculos que permitan solucionar problemas y reporten beneficios, declaró durante la apertura del XV Seminario de Relaciones Internacionales ISRI-2024.

En el teatro Pelegrín Torras de la Luz, del Instituto Superior de Relaciones Internacionales (ISRI), Vidal dictó la conferencia inaugural del evento «El proceso de acercamiento entre Cuba y Estados Unidas bajo el gobierno del presidente Barack Obama. Lecciones aprendidas».

Según opinó, la aproximación que duró entre diciembre de 2014 y enero de 2017 legó «un modelo de lo que pudiera ser una relación de convivencia entre los dos países», aunque no exento de dificultades. Un modelo, señaló, con grandes desafíos dada la persistencia de profundas diferencias y, más importante aún, de la contradicción fundamental resultante de la pretensión de dominación de Estados Unidos y de la determinación de Cuba a defender su soberanía.

Aunque hay un retroceso en las relaciones bilaterales y los acuerdos del período de Obama se mantuvieron inoperantes o se incumplieron bajo la administración de Donald Trump, todos sobrevivieron y han servido de base para retomar ciertos niveles de cooperación, comentó.

Vidal calificó el proceso de acercamiento de inédito y efímero porque con el mandato de Trump regresó «la confrontación abierta que ha predominado a lo largo de estos 65 años, haciéndolo parecer, con toda razón, excepcional e irrepetible».

Declaró que para «dos países que no habían tenido relaciones y apenas interactuaron y dialogaron durante más de cinco décadas, no fue irrelevante lo logrado en solo dos años».

Entre los logros del período, incluyó la liberación de los últimos tres héroes de los cinco que guardaron prisión en suelo norteamericano y la exclusión de Cuba de la lista de estados patrocinadores del terrorismo.

También el restablecimiento de las relaciones diplomáticas y las reaperturas de las embajadas en Washington y La Habana, la creación de la comisión bilateral Cuba-Estados Unidos, 25 visitas de alto nivel en ambas direcciones y tres reuniones entre los presidentes.

Quedó demostrado, subrayó, que Cuba y Estados Unidos pueden intentar construir una relación de nuevo tipo, basada en el respeto y que, a la vez, reconozca las diferencias existentes.

El seminario, que concluirá este jueves, es organizado por el ISRI, el Ministerio de Relaciones Exteriores, Hanns Seidel Foundation y el Instituto de las Naciones Unidas para la Formación Profesional e Investigaciones.

Bajo el lema «Las Relaciones Internacionales en el mundo actual: desafíos y oportunidades» y en siete comisiones de trabajo, 58 ponencias procedentes de Cuba, Argentina, México, Venezuela y Rusia, entre otros países, analizarán varias aristas del tema.

 

Diplomático de Cuba condena consecuencias del discurso de odio

La Habana, 26 mar (Prensa Latina) El subdirector general para América Latina y el Caribe en el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, José Carlos Rodríguez, denunció hoy que la incitación al odio no es inocente y tiene consecuencias para las naciones.

A través de su cuenta en X, el diplomático aseguró que las opiniones intolerantes y extremistas son tóxicas y se propagan a toda velocidad, envenenando a la sociedad.

En este sentido, llamó a comprender el profundo significado de un llamado de la Organización de Naciones Unidas (ONU) a no promulgar este flagelo, titulado «El discurso de odio se extiende por todo el mundo».

El texto de Naciones Unidas afirmó que la narrativa basada en el rencor promueve la violencia y la intolerancia y su efecto es devastador; aunque, por desgracia, no es nada nuevo.

Alertó que su escala e impacto se ven ahora aumentados por las nuevas tecnologías de la comunicación, e internet resulta una de las formas más habituales de extender una retórica divisoria a escala global, poniendo en peligro la paz en todo el mundo.

De acuerdo con el llamamiento, los efectos del discurso de odio abarcan numerosas áreas como la protección de los derechos humanos, la prevención de crímenes atroces para el mantenimiento de la paz, el logro de la igualdad de género y la ayuda a niños y jóvenes.

La ONU recaló además que trabaja para combatir este fenómeno, puesto que la lucha contra el odio, la discriminación, el racismo y la desigualdad está entre sus principios básicos.

Cuba sufre constantemente el discurso de odio, fundamentalmente por parte de personeros radicados y financiados por Estados Unidos que incitan a la violencia y la desestabilización, e intentan desacreditar los logros del proceso revolucionario.

Los odiadores sueñan con invasiones imperialistas y estallidos sociales.

El incidente más reciente fue el pasado 17 de marzo, cuando autoridades, «influencers» y medios estadounidenses intentaron magnificar y calificar de antigubernamentales las protestas pacíficas en Santiago de Cuba (oriente) por el aumento de los apagones y la escasez de alimentos, a causa fundamentalmente del bloqueo económico de Washington.

Cuba
Canal Caribe.- Colectivos de trabajo a lo largo de toda Cuba se preparan para festejar este Primero de Mayo el Día Internacional de los Trabajadores. Sobre los compromisos para celebrar la fecha en Ciego de Ávila, Mayabeque y Santiago d...
Canal Caribe.- A propósito de la convocatoria realizada por el Consejo de Estado para cubrir los cargos de gobernadores y vicegobernadores que quedaron vacantes en cuatro provincias de Cuba, conversamos con Eraida Espinosa Aguilar, quien se de...
Faraj Allah Jarjour en imagen de sus redes sociales. Foto tomada de La Jornada....
Lo último
La Columna
La Revista