El programa lo pusieron en marcha Cuba y Venezuela en 2004 y en principio estaba destinado a América Latina, aunque se ha extendido al Tercer Mundo en general. El propósito era operar a seis millones de personas de Latinoamérica en diez años de manera gratuita.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la discapacidad visual no está distribuida uniformemente por el mundo. Aproximadamente un 85% de las personas con discapacidad visual viven en países en desarrollo.
Los resultados de encuestas desarrolladas en 9 países de Latinoamérica y Caribe señalan que las máximas prevalencias de ceguera y discapacidad visual se presentan en zonas rurales y marginales.La carga de la ceguera no está distribuida uniformemente en la América Latina y el Caribe. En muchos países es estimado que por cada millón de habitantes hay 5.000 ciegos y 20.000 personas con discapacidad visual, al menos dos terceras partes es debido a causas tratables.
A pesar del trabajo que se viene realizando en la materia, la “Operación Milagro” no tiene cabida en las redes habituales de información, sobre todo por presiones de grupos económicos y gremiales muy influyentes (médicos y clínicas privadas de los países donde se trabaja, empresas farmacéuticas, etc.)
La conferencia, que se titula “Operación Milagro, la solidaridad Censurada”, tuvo lugar en el Instituto de Estudios Portuarios de Málaga. Estuvo organizada por la Asociación de Amistad Hispano Cubana de Málaga y forma parte de la actividades paralelas de Málaga Mundi 2010 que se celebra desde hoy.
Bárbara del Rosario es vicedirectora provincial de Asistencia Médica en Pinar del Río (Cuba) y está diplomada en higiene y epidemiología, sanidad materno infantil y adolescencia.
Por su parte, Osmani Correa (oftalmólogo) es director del hospital provincial de Pinar del Río, profesor auxiliar de la Universidad Médica de dicha zona. Ha tenido experiencia de colaboración en Venezuela y Haití.
En la foto que se adjunta aparecen ambos médicos y la presidenta de la Asociación de Amistad Hispano Cubana de Málaga, Emiliana Durán (en el centro).
