AIN.- El bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por el gobierno de Estados Unidos contra Cuba hace medio siglo mantiene sus afectaciones en la ciencia y la tecnología, sector crucial para el desarrollo socio-económico.

Expertos cubanos también citaron el hecho de que la Empresa Importadora, Exportadora y Distribuidora para la Ciencia y la Técnica no pudo concluir negociaciones para la adquisición de componentes electrónicos, con destino al Instituto de Cibernética, Matemática y Física (ICIMAF).

La entidad forma parte del Grupo Premier Farnell, uno de los principales distribuidores mundiales de dispositivos de ese tipo en territorio estadounidense, y con sucursales en más de 40 naciones.

Su rechazo comercializador provocó demoras en la producción de los equipos médicos del ICIMAF y del CEADEN para el sistema nacional de salud, en su exportación, y obligó a la búsqueda de otras alternativas.

A su vez, especialistas del Centro de Ingeniería Ambiental (CIAC) de la provincia de Camagüey, enfrentan serias dificultades para la publicación de sus resultados científicos en revistas estadounidenses de impacto.

CIAC se dedica a obtener, aplicar y difundir conocimientos para la gestión de la ciencia, la tecnología y el medio ambiente, a partir de proyectos de investigación, servicios de alto valor agregado y producciones especializadas, sobre la base de tecnologías nucleares y de avanzada.

Desde su inicio poco después del triunfo de la Revolución, la guerra económica de Estados Unidos contra la Isla sobrepasa en valores los 751 mil 363 millones de dólares, si se tiene en cuenta la depreciación paulatina de esa moneda.

Bruno Rodríguez Parrilla, canciller cubano, presentará el informe sobre la necesidad de eliminar el bloqueo, en el 65 período ordinario de sesiones de la Asamblea General de la ONU, que deliberará después de la reunión cumbre de alto nivel sobre el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio. (AIN).