Gerardo Moyá Noguera*.- El presidente de Francia, Macron, ha decretado "el fin de la abundancia" y además pide esfuerzos y sacrificios a los ciudadanos franceses. En el mundo socialista de Cuba, Venezuela, Nicaragua, Bolivia, etc. los presidentes de estos países no piden el fin de la abundancia, simplemente porque no la hay. En el continente europeo o llamado continente capitalista sí que existe abundancia, por lo menos en la mayoría de sus ciudadanos, no así en otros como latinoamericanos que no existe ni hay abundancia de productos, ya que estos solo están en las manos de los más ricos del planeta.
Los presidentes o presidente de Francia ha errado el tiro ya que quien o quienes tienen más abundancia de todo son los ricos y a estos no se les puede exigir ni pedir esfuerzos ni mucho menos sacrificios. Entonces ¿qué? Pues que seguirá todo igual por mucho que los altos dignatarios, como Macron, decreten el fin de la abundancia. El pasado jueves yendo en el bus oí a un ciudadano afirmando lo siguiente: "Seguro que los políticos cuando viajan en sus coches oficiales para asistir a algún evento, el aire acondicionado no está a 27º sino más bajo", haciendo referencia al calor existente en el bus en que viajábamos. En los países como Cuba, Venezuela afirmo rotundamente que no hay abundancia y si la hubiera sería repartida entre todos sus ciudadanos como ocurre u ocurriría en los países socialistas, auténticamente socialistas. No olvidemos que una vez casi superada la pandemia existen en el mundo más ricos en detrimento de los pobres que cada día son los más, incluso trabajadores.
Presidente de la Casa de Amistad Baleares-Cuba
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