Por estos días, es noticia que Encarcelan a dos colombianos presuntos asesinos de migrantes cubanos, toda vez que el Juez Primero Penal Municipal de Turbo, en el departamento de Antioquia (noroeste) del país sudamericano dictó la medida contra los dos hombres investigados por los delitos de violación, feminicidio, homicidio agravado, tortura y tráfico de migrantes.
El trascendido acredita que los hechos ocurrieron el pasado 8 de Septiembre en la ciénaga de Matuntugo, en el Golfo de Urabá, donde los dos cubanos fueron asesinados con arma blanca cuando pretendían llegar a Panamá por el Tapón del Darién, para continuar su camino que tenía como destino final a Estados Unidos; y que la Fiscalía declaró:
“Entraron a Colombia por la frontera venezolana y se instalaron en el municipio costero antioqueño durante dos semanas para luego realizar la travesía por tierra hasta Centroamérica. Un día antes de salir hacia la frontera, fueron conducidos a la casa de uno de los victimarios y allí pasaron la noche”.
Asimismo, se supo que Liober Santos Corria, un cubano de 33 años de edad, relató que viajaba en compañía de su novia, Edelvis Martínez Aguilar, y de un amigo, guiados por dos de los “coyotes” que a cambio de ayudarlos a cruzar la frontera panameña, les cobraron 1 500 dólares a cada uno.
Santos explicó también que cuando iban rumbo a la frontera, en inmediaciones de la ciénaga de Matuntugo, los hombres exigieron más dinero, pero como no tenían nada para darles, los despojaron de sus pertenencias, abusaron sexualmente de la joven y posteriormente la asesinaron, al igual que al amigo que les acompañaban; mientras que él logró huir.
La información consta además de un dato espeluznante: “Los cuerpos de las víctimas fueron hallados en la ciénaga de Matuntugo amarrados a un tronco, sumergidos en el río”.
Lo sucedido, tuvo lugar al amparo de una triste realidad, a saber: a contrapelo de que el portavoz del Departamento de Estado, John Kirby, confirmó a finales de Agosto que había recibido la carta enviada al jefe de la diplomacia estadounidense, John Kerry, por los cancilleres de Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, México, Nicaragua, Panamá y Perú con el reclamo de revisar la política migratoria Made in USA respecto a Cuba, EEUU reafirmó la continuidad de la barbarie en tal sentido.
En la ocasión, dijo Kirby en su conferencia de prensa diaria: “Obviamente, estamos preocupados por la seguridad de todos los migrantes en la región, incluidos los que tratan de ir al norte a través del sur y el centro de América y de México”. Sin embargo, sentenció: “La Ley de Ajuste Cubano sigue en pie y la política de ‘pies secos/pies mojados’ sigue siendo la política estadounidense en lo relativo a la migración cubana”.
Recuérdese que la Ley de Ajuste Cubano, vigente desde 1966, y la política de “pies secos/pies mojados” privilegian a los cubanos que tocan territorio estadounidense, que pueden pedir la residencia permanente un año después; mientras que los interceptados en el mar son devueltos a la isla. Incluso, poco importa si los enrolados en el lance son criminales cubanos fugitivos de nuestra Justicia.
Así, al tiempo que ratifico una vez más que abogo por que cada quien pueda vivir donde mejor le parezca, me considero uno de los tantos y tantos seres humanos que en mi Caimán Verde y más allá de nuestra fronteras estamos a favor de un orden migratorio Cuba-EEUU con toda la seguridad del mundo, so pena de la ocurrencia de más casos como el aquí narrado.
Por tanto, exijamos, por enésima vez, el cese de la Ley de Ajuste causante de un sinnúmero de lutos a la familia cubana. ¡Amén!
