Angélica Arce Montero, Juan Emilio Calvo Ochoa, Enrique González Díaz (Enro), Carlos Pendás - Cubadebate.- “Fui atleta de esta escuela en el deporte de taekwondo. No me había ido muy bien, pero hace unos meses me enteré que iba a empezar el boxeo femenino y decidí cambiarme.

“A raíz de eso, me he ido proponiendo metas. Me ha gustado el boxeo desde que era niña, y si se hubiese aprobado en esa etapa, estoy segura de que lo hubiese practicado, incluso antes del taekwondo” (Arianne Imbert, 20 años, representante de los 66 kg).

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“Nunca pensé practicar el boxeo, pero tampoco le tenía miedo, porque es bellísimo y más para las que nos gustan los deportes de combate. Así que exhorto a las jóvenes que aún lo están pensado a que experimenten y que prueben.

“No existe ningún temor de recibir un golpe, ni de presentar un problema de salud. Están todos los medios de protección, así que no hay problema con eso” (Lianet Gómez, 22 años, exponente de los 60 kg).

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El sonido de los guantes, silbatos, campanas y la algarabía por las peleas delata desde la distancia que hay un gimnasio de boxeo, en medio del Estadio Panamericano de La Habana.

La instalación, perteneciente a la Escuela Superior de Formación de Atletas de Alto Rendimiento Giraldo Córdova Cardín, hace unos meses reúne a más afición que de costumbre.

Muchos son los que se acercan al moderno gimnasio, provisto de tecnología de punta desde su inauguración en 2017, para ver entrenar a las 12 muchachas que representarán a Cuba en venideras competencias internacionales.

Al llegar este equipo de prensa, el técnico Santiago Suárez lo tiene todo coordinado junto al también entrenador Jorge Noriega. Llama para el ring a las chicas y entre las doce cuerdas conocemos cómo han sido estos primeros meses de la práctica del boxeo femenino en Cuba, después de que se aprobara el 5 de diciembre de 2022.

“Tras esta decisión, nos propusimos conjuntamente con la Federación Cubana de Boxeo seleccionar 12 atletas para conformar el equipo femenino que participará en las principales competencias de este año: Juegos del ALBA, Centroamericanos y Panamericanos”.

Por tal motivo, se celebró un tope de preparación, quedando así las doce integrantes que representarán a Cuba en eventos en el extranjero. La prueba de fuego será la cita del ALBA, en el mes de abril.

Sobre las características del conjunto, Suárez recalcó que son atletas que nunca han practicado el boxeo de forma oficial, sino que lo han hecho como un pasatiempo. No obstante, hay varias que provienen de otros deportes.

“Tenemos chicas que han practicado karate, taekwondo, lucha y atletismo. Entonces, sobre esa base nos propusimos hacer esta preselección. Lógicamente, presentan un nivel técnico medio, porque—cómo te decía—es la primera vez que practican el deporte y no han participado en ninguna competencia de boxeo, o sea, no tienen experiencia competitiva”, agregó el entrenador.

Suárez, quien habitualmente ha preparado al equipo cubano masculino de la categoría juvenil, aclaró que para empezar a preparar a las boxeadoras no pasó ningún curso de capacitación.

“Fue cuestión de solo ajustar algunas cosas que las mujeres no deben hacer, además, ellas se preparan con medios de protección, sobre todo el de senos. En mi caso, sigo entrenando a los juveniles, lo que he incorporado nuevos elementos para trabajar con el femenino”, apuntó.

De cara a los Juegos del ALBA, el experimentado entrenador asegura que, “aunque no hemos tenido la posibilidad de chocar con boxeadoras de otros países, las nuestras se han preparado bien, haciendo énfasis en los elementos técnicos como los golpes rectos, los desplazamientos y la defensa.

“No las hemos cargado en realizar dos o tres acciones ni muchas que combinen varios golpes, porque eso sería más complicado y todavía no tienen el dominio requerido sobre los elementos técnicos del deporte”.

Acto seguido, tuvimos un breve sparring con el Dr. Armando David Cámara Tejedor, especialista en medicina general integral, quien explicó que desde el inicio de la práctica del boxeo femenino en Cuba se crearon las condiciones para garantizar el estado óptimo de la salud de las atletas.

“Lo primero fue contar con los medios de protección y alistar la triada médica dentro de un equipo deportivo (médico, fisioterapeuta y un sicólogo). Esto ha constituido un elemento importante en el proceso y la dinámica del entrenamiento deportivo, con el objetivo final que se obtenga el resultado esperado.

“A las muchachas, le impartimos charlas educativas sobre sexualidad, roles de género, el control del peso corporal, la alimentación, el dopaje y la relación trabajo-descanso para lograr una recuperación adecuada.

“Tampoco ha faltado la realización de pruebas médicas de laboratorio y de terrenos. Primeramente, para conocer el estado de salud de las boxeadoras al comienzo del macrociclo de entrenamiento y después en cada mesociclo.

“Además, el sicólogo ha jugado un papel determinante al realizar terapias grupales e individuales con las atletas, para hacerlas entender por qué están haciendo historia”, aseguró Cámara Tejedor.

Entre las doce cuerdas, ellas dan fe

No he pensado en tener una entrenadora, pero seguramente con el transcurso del tiempo va a haber 

“Mi deporte siempre ha sido el atletismo. Es mi favorito. Y luego, el boxeo.

“Llegué al boxeo femenino hace siete años, aunque no de manera oficial y con intermitencias en el gimnasio Rafael Trejo, de La Habana Vieja. Al principio no podía practicar sistemáticamente, y después llegó la pandemia.

“Antes de venir para esta escuela seguía en el atletismo. Estaba en la casa, había parido y quería volver a entrenar. Cuando llegué a este centro, me di cuenta que había mujeres practicando boxeo y quise empezar.

“Me he adaptado bastante bien y el atletismo me ha ayudado en las carreras. He ido progresando. Trato de mejorar cada vez que hago una carrera hasta el túnel de La Habana.

“No he tenido ningún temor. Asumo el boxeo como un deporte y también como defensa personal, porque igual me prepara.

“En estos meses, me he sentido cansada, porque estamos entrenando muy fuerte, pero vamos cumpliendo con los objetivos de la preparación, para hacer un buen papel en la competencia. Mis aspiraciones en los Juegos Centroamericanos y los Panamericanos son traer medallas para Cuba.

“Con los profes, nos va bastante bien, son como familia de nosotros. Aún no he pensado en tener una entrenadora, pero seguramente con el transcurso del tiempo va a haber mujeres y hombres que enseñen a un equipo femenino.

“Les aconsejo a todas las niñas, adolescentes o jóvenes que le guste la disciplina, que la prueben y lo intenten. Va y hacemos más historia”. (Legnis Cala, 31 años, representante de los 57 kg).

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Prefiero los deportes de combate

“Allá en Guantánamo, me enteré de que empezaría el boxeo. Yo era del deporte de la lucha y había sido varias veces medallista panamericana y centroamericana.

“Llevaba tiempo sin practicar la lucha y en ese momento me llamó la atención el boxeo, porque me ha gustado siempre. Me encanta ser hiperactiva, por eso prefiero los deportes de combate.

“Entonces, fui a la academia. Llamé al profe Santiago y me dijo que sí, que no había problema. Fue cuando me incorporé a entrenar.

“Aquí en La Habana se hizo una convocatoria, participamos en algunos combates y así seleccionaron a las doce que estamos aquí, en el conjunto nacional.

“Como te dije, vengo de un deporte de combate. El boxeo es de mucho movimiento, más agresivo, fuerte. Aquí me están dando la tarea de la coordinación, porque es muy bueno para las piernas y hace falta en el boxeo.

“Me gustan tanto la lucha como el boxeo, aunque vengo también del judo. En este último, hice equipo nacional al igual que en la lucha. Pero ahora es tiempo de boxeo.

“La preparación física está muy buena, aunque sobre todo hay que hacer hincapié en la técnica, porque ya varias tenemos la física adelantada de otros deportes.

“Trabajamos en los rectos, los swings, los ganchos. A lo que agregamos mucho desplazamiento, saltos con la suiza y trabajo de coordinación.

“En sí me preparo más para los Centroamericanos que para los Juegos del ALBA, los que nos abrirán paso para próximas competencias, ya que el boxeo femenino es nuevo en Cuba” (Jacqueline Estornell, 37 años, representante de los 75 kg).

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Me esforcé y logré entrar al equipo

“Para mí ha sido un gran esfuerzo, ya que no había practicado otro deporte anteriormente. Pero nada, el organismo se adapta y no hay gloria si no hay sacrificio.

“Empecé en el boxeo como un hobby, para mantenerme bien físicamente y para aprender algo de defensa personal. Eso fue hace un año atrás, aunque siempre me ha gustado verlo por la televisión.

“Además, me encuentro familiarizada, porque tengo dos primos boxeadores y mi pareja fue boxeador, hoy día es entrenador. Entonces, en la casa también aprendo.

“En el gimnasio que practicaba el boxeo, en el Rafael Trejo, se comentó que se iba aprobar el boxeo femenino y me interesé. Mis objetivos iniciales cambiaron. Empezó como una distracción, luego lo tomé más en serio y empecé a prepararme para la preselección nacional que se realizó en diciembre. Me esforcé y logré entrar al equipo.

“En la escuela me he sentido bien y tengo buenas relaciones con mis compañeras. En cuanto a las condiciones para la práctica del deporte son buenas: tenemos guantes, cabeceras, protectores, etc” (Karen Leandra Cantillo, 25 años, representante de los 54 kg).

Puig de la Barca: El boxeo femenino llega a todo el país

De acuerdo con el presidente de la Federación Cubana y Comisionado Nacional de Boxeo Alberto Puig de la Barca, las alumnas de Santiago Suárez tienen mucho interés, disciplina y han mejorado sustancialmente su preparación y  resultados técnicos.

“La técnica es el tema más complicado, porque muchas de ellas proceden de otros deportes, o sea, tienen una preparación física bastante actualizada. Solo les faltan los aspectos técnicos y tácticos que son los que están adquiriendo en estos momentos.

“En el mes de abril cuando asistan a los Juegos del ALBA, les permitirá adaptarse a las competencias, sobre todo a las internacionales, para ir conociendo a sus rivales, a quienes enfrentarán en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, donde pensamos llevar el equipo femenino completo”.

El federativo declaró a Cubadebate que los aires del boxeo femenino llegan a todo el país.

“Acabo de realizar un recorrido por las provincias y realmente es estimulante ver cómo ha ido prendiendo, sobre todo en las instituciones de bases, la incorporación de jóvenes, y de mujeres adultas al boxeo.

“En las academias provinciales pudimos ver que hay cinco o seis boxeadoras, preparándose para el primer campeonato nacional que lo vamos a efectuar en noviembre de este año. Y el otro reto que tendrían las mujeres son los Juegos Panamericanos.

“Ya se ha revisado con las provincias y en el próximo curso escolar, es decir, en el 2023 -2024, tendremos alumnas en las categorías de 15-16 años en las EIDE del país.

“Además, en el 2024, en los Juegos Escolares, participarían seis divisiones, con la representación de todos los territorios. Sería el primer evento escolar que se realizaría en Cuba”.

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Cuba va por más en el boxeo femenino

“Vengo de otro deporte, del karate. Ya yo residía en este centro, integraba el equipo nacional, cuando me dijeron que iban a abrir el boxeo femenino. Entonces, decidí venir a entrenar, y al hacerse el concentrado quedé seleccionada entre las doce.

“El boxeo me inspira. Siempre me ha gustado: por su ritmo, adrenalina....Si se hubiese podido practicar antes, no hubiese sido karateca, el boxeo me atrapa más.

“Y aquí estoy preparándome, porque también me escogieron para el conjunto que irá al ALBA. Estoy bajando de peso y ya estoy en mi división.

“Me siento contenta y, a la vez, ansiosa porque voy a competir a nivel internacional.

“Técnicamente, enfatizo en los rectos. La preparación está fortísima. Comenzamos con la parte física a las cuatro y media de la mañana y después a las nueve y media, trabajamos el aspecto técnico”.

La joven destacó el apoyo brindado hasta el momento. “Todo lo que comienza puede mejorar, pero hasta ahora estamos contentas con la organización y el tratamiento que se nos ha dado.

“Como capitana siempre le digo a las muchachas que podemos y vamos a lograrlo. Cuba va por más en el boxeo femenino”. (Lianet Gómez, 22 años, representante de los 60kg).

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Seguiremos el ejemplo de Mariana Grajales

“Me gusta mucho el boxeo, porque desde pequeña soy amante de los deportes de combate. Aunque sea uno de los más rudos, me fascina y no me da ningún temor.

“Los entrenamientos son duros, porque a diario nos levantamos a las cuatro y media de la mañana. Lunes, miércoles y viernes corremos, y martes, jueves y sábado hacemos ejercicios de fuerza.

“Lo más difícil son las carreras, porque son unos cuantos km hasta el túnel del Bahía, pero me gusta porque de forma sana competimos entre nosotras para ver quién corre más.

“Ahora mismo me estoy preparando para los juegos del ALBA. Mi división es 66 kg. La he hecho antes en el taekwondo y me siento bien, a pesar de que soy nueva. Es la primera vez que competiré en un evento internacional, pero me siento preparada.

“Quiero desde aquí dejarle un mensaje a esas muchachas que, aunque lo desean, aún no llegan a este gimnasio. Les digo, que no tengan miedo, porque en la historia de Cuba tenemos una gran emprendedora, que fue Mariana Grajales, y ella nos enseñó que siempre se puede” (Arianne Imbert, 20 años, representante de los 66 kg).

Acebal, Namibia, Alcides y La Cruz confían en que ellas asalten el ring

Sobre la preparación de la selección femenina cubana de boxeo, el jefe de entrenadores de la escuadra masculina Rolando Acebal aseguró que ha marchado muy bien.

“Lógicamente, fue algo emergente porque no teníamos tradición de tener las mujeres entrenando, pero hasta ahora todo transcurre según lo planificado.

“Es un reto grande, porque el boxeo femenino en el mundo tiene mucho desarrollo y nosotros apenas iniciamos. Estamos atrasados en este sentido, o sea, hemos comenzado tarde.

“Pero, nadie duda del valor y las agallas que tienen las mujeres cubanas desde los tiempos más remotos. Ahora, que tampoco se imaginen que los resultados vendrán tempranamente, será un proceso largo de preparación”.

Para ello, refiere Acebal, se diseñan estrategias. “Queremos tener niñas en todas las escuelas del país, con el proceso adecuado de iniciación. Así, llegarán a las academias ya con la enseñanza y el perfeccionamiento de la técnica puramente de boxeo.

“Esto requiere de un periodo de tiempo largo para alcanzar resultados internacionales, pues se necesitan años de trabajo, pero vamos a competir con las que tenemos.

“Estamos seguros de que se obtendrán algunas medallas, por lo menos a nivel Centroamericano y, quizás, Panamericano. Es a lo que aspiramos, y es el entusiasmo que reina hoy día, al tener ya aprobada la práctica del boxeo femenino”.

Para Namibia Flores, quien practicó el deporte durante décadas antes de su aprobación en Cuba, la selección femenina cubana tiene posibilidades de dar un buen espectáculo en los Juegos del ALBA.

“Las habaneras fueron compañeras mías de equipo. Están muy bien preparadas, al igual que la 75 kg, de Guantánamo.

“En el conjunto, los pesos pesados están mejor técnicamente, aunque todas están en condiciones de dar pelea. Confío mucho en los puños de Legnis, Reynalbell, Idamelis y la Estornell”, señaló la matancera de 46 años.

Alcides Sagarra, por su parte, agradece a Dios y a la vida por darle la posibilidad de haber vivido el momento de aprobación del boxeo femenino. “Aunque aún no las he visto sobre el ring, me llena de orgullo que ya puedan boxear. Están en su derecho y esto comienza ahora,” dijo vía telefónica el avezado entrenador, de casi 87 años de edad.

“Sagarra convidó a los nuevos técnicos a consultar los libros Tres rounds con Alcides Sagarra y Escuela Cubana de Boxeo: confesiones de Alcides Sagarra, ambos de su autoría junto a Marcos Alfonso.

“Desde ese entonces creíamos en el boxeo femenino y ahí aparecen mis consejos para realizar la preparación física general, la especial, donde las carreras son fundamentales. Además, son explicadas las características de cada división de peso: 48, 51, 54, 57, 60, 64, 69 y 75 kg”.

Las dice de memoria e insiste en que “todas esas lecturas pueden ayudar a los actuales entrenadores, porque la esencia del boxeo sigue siendo la misma. Mi deseo es que las mujeres cubanas que practiquen este deporte lleguen a ser campeones olímpicas y mundiales. No sé cuándo sucederá, pero estoy seguro de que lo serán”.

En tanto, el doble campeón olímpico Julio César La Cruz, afirma que se trata de un nuevo comienzo y etapa para la mujer. “Se han adaptado bien y han asumido la responsabilidad cómo debe ser.

“La mujer cubana es fuerte y valiente. Así que esperemos buenos resultados de ella en competencias venideras”.

Escuadra cubana de boxeo femenino:

Jacqueline Estornell (75 kg); Arianne Imbert (66 kg); Legnis Cala (57 kg); Lianet Gómez (60 kg); Reynabell Grant(50 kg); Idamelis Moreno (54 kg); Melany de la Caridad Girado (60 kg): Julianet Díaz (54 kg); Karen Leandra Cantillo (54 kg); Eliannis Polledo (50 kg); Nayla María Lahera (50 kg) y Laritza Mely León (75 kg).

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